El fallecimiento del destacado científico colombiano Manuel Elkin Patarroyo fue confirmado la tarde de este jueves por el doctor Carlos Francisco Fernández, amigo cercano del investigador. Según Fernández, el reconocido inmunólogo murió en su residencia en Bogotá como consecuencia de un paro cardiorrespiratorio. Patarroyo, aclamado mundialmente por sus contribuciones a la inmunología y su incansable dedicación a combatir enfermedades infecciosas, deja un legado profundo y multifacético, marcado por logros significativos, controversias, y un inquebrantable compromiso con la ciencia y la salud pública.
Una vida dedicada a la ciencia
Nacido en Ataco, Tolima, en 1946, Patarroyo estudió Medicina y Cirugía en la Universidad Nacional de Colombia, institución a la que estuvo profundamente vinculado a lo largo de su carrera. Sus estudios en inmunología y virología en Estados Unidos le permitieron establecerse como una figura clave en la investigación biomédica. Fue director del Instituto de Inmunología del Hospital San Juan de Dios en Bogotá y profesor asociado en universidades prestigiosas como Rockefeller en Nueva York y Estocolmo en Suecia.
Recibió numerosos premios, entre ellos el Premio Nacional de Ciencias de Colombia, el Premio del Estado de Sao Paulo y el galardón de la Academia de Ciencias del Tercer Mundo. Estas distinciones resaltan su compromiso con la ciencia, especialmente en un país con limitados recursos para la investigación.
Vacuna experimental SPf66
El trabajo más reconocido del científico colombiano fue el desarrollo de la vacuna experimental SPf66 contra la malaria. La vacuna, diseñada para combatir el parásito Plasmodium falciparum, generó grandes expectativas en la comunidad científica internacional. Sin embargo, no alcanzó los niveles de eficacia necesarios para ser utilizada a gran escala, lo que limitó su impacto como herramienta de salud pública.
A pesar de los resultados insuficientes, su investigación abrió caminos en la biotecnología y el desarrollo de vacunas. Como señaló el infectólogo Jorge E. Gómez-Marín, los avances de la Fundación Instituto de Inmunología de Colombia (FIDIC) en el estudio de los péptidos y la respuesta inmune han contribuido significativamente al progreso científico, con aplicaciones actuales en vacunas terapéuticas para enfermedades como el cáncer.
Controversias y desafíos éticos
Su trayectoria no estuvo exenta de controversias. Uno de los episodios más polémicos fue el uso de primates amazónicos en sus investigaciones. Aunque el científico defendió estas prácticas como éticas y necesarias, los grupos ambientalistas criticaron duramente el impacto en especies protegidas. En 2011, el Consejo de Estado revocó el permiso de la FIDIC para usar estos animales, decisión que fue suspendida en 2015 en defensa del derecho a la investigación científica.
Otro punto controvertido fue su afirmación de haber descubierto un método para desarrollar vacunas contra 517 enfermedades, una declaración que careció de respaldo científico y generó escepticismo en la comunidad académica. Durante la pandemia de COVID-19, Patarroyo también fue criticado por minimizar el impacto del virus, generando confusión en momentos críticos.
el legado perdurable de Patarroyo
La comunidad científica nacional e internacional recuerda a Manuel Elkin Patarroyo como un hombre visionario, capaz de desafiar los límites del conocimiento en busca de soluciones a problemas globales. Gabriela Delgado, decana de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional, destacó su impacto en la formación de nuevas generaciones de investigadores. “Antes de que el país tuviera un marco normativo para posgrados, él creó una escuela que formó a magísteres, doctores y científicos que hoy ocupan posiciones clave en el mundo”, afirmó.
La Universidad Nacional y diversas instituciones han expresado sus condolencias, resaltando su invaluable aporte a la ciencia y la salud pública. Su muerte deja un vacío en la comunidad científica, pero también invita a reflexionar sobre el papel de la investigación en los países en desarrollo y los desafíos éticos que conlleva. Como señaló Delgado: “Su legado seguirá inspirando a quienes creen que la ciencia es el camino hacia un mundo mejor”.
Manuel Elkin Patarroyo será recordado como una figura emblemática de la ciencia colombiana, un pionero que, a pesar de las controversias, dedicó su vida a buscar soluciones para las enfermedades que afectan a las poblaciones más vulnerables.