En los últimos nueve meses, la Superintendencia Nacional de Salud (Supersalud) llevó a cabo un total de 41 auditorías en clínicas, centros de atención especializada y hospitales públicos de 29 departamentos en nuestro país. En el proceso, el ente de vigilancia y control encontró 360 hallazgos o incumplimientos en el marco normativo del sistema de salud, los cuales tuvieron un impacto en la prestación de servicios a los pacientes.
Las auditorías y visitas se realizaron tanto en instituciones privadas como públicas, abarcando un total de 25 prestadores de servicios de salud privados y 16 públicos. El objetivo principal fue verificar el cumplimiento de los aspectos administrativos, financieros y de prestación de servicios, con el fin de salvaguardar el derecho a la salud y proteger los recursos públicos del sistema.
Según el informe, 30 de las auditorías se enfocaron en aspectos específicos, evaluando la calidad de la atención en indicadores críticos como la mortalidad materno perinatal, la salud mental, la desnutrición de los pacientes y la atención a las víctimas de accidentes de tránsito bajo el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT).
Durante el periodo referido por la Supersalud, además, se ha implementado una metodología de seguimiento en los hospitales públicos, centrándose en las Empresas Sociales del Estado (ESE) que han sido reportadas por el Ministerio de Hacienda debido a incumplimientos en el Programa de Saneamiento Fiscal y Financiero. Como medida preventiva, se ha establecido un Plan de Mejoramiento Institucional (PMI) en colaboración con los entes territoriales de cada departamento o distrito; a través de este se han suscrito acuerdos con 23 hospitales.
¿Cómo le fue a los hospitales públicos con la auditoría de la Supersalud?
En relación a los hospitales públicos bajo medidas especiales de la Supersalud, se ha tomado la decisión de intervenir administrativamente el hospital Luis Ablanque de la Plata en Buenaventura. Además, se ha procedido a la transferencia de la gestión de los hospitales Alejandro Próspero Reverend y Julio Méndez Barreneche en Magdalena, así como de las ESE San Jerónimo y Sandiego de Cereté en Córdoba, a las entidades territoriales correspondientes.
Dentro de las estrategias implementadas también se cuenta el seguimiento a los acuerdos de reestructuración de pasivos en 7 hospitales, así como a través de 24 auditorías de seguimiento a los planes de recuperación integral. Los mecanismos para fortalecer la atención a los ciudadanos y mejorar los indicadores han sido dirigidos a hospitales de Bolívar, Chocó, Guajira, Cesar, Quindío, Amazonas, Valle y Nariño con los siguientes resultados:
- Los 9 hospitales intervenidos han presentado una disminución del 71% en los pasivos asociadas a la nómina, y 4 de ellos mostraron una disminución del 62% de las deudas con sus contratistas.
- Frente al recaudo corriente y la recuperación de cartera, 4 hospitales mostraron un incremento del 12% en promedio en la proporción del recaudo frente a la facturación (venta de servicios) y a la cartera acumulada.
- En cuanto a sus ingresos, los mismos hospitales intervenidos por la Supersalud lograron un incremento en promedio de su facturación del 169% con relación a las cifras registradas al momento de la adopción de la medida especial.
- Frente al mantenimiento preventivo hospitalario, 8 de los 9 centros asistenciales evidenciaron un incremento del 66% en las actividades ejecutadas comparadas con las programadas.
En la actualidad, los hospitales intervenidos han incrementado su capacidad de atención, contando con una oferta total de 136 camas destinadas a pacientes en estado crítico. De estas, 70 camas corresponden a unidades de cuidados intensivos, mientras que 66 camas están destinadas a cuidados intermedios. Además, se han implementado nuevos servicios especializados que refuerzan la calidad de la atención en salud, garantizando una mayor oportunidad y accesibilidad para los pacientes.
Por otro lado, la Supersalud destacó que se disponen nuevos servicios especializados habilitados o reaperturados que contribuyen con el mejoramiento de la calidad de la atención en salud garantizando una mejor oportunidad y accesibilidad.
