Durante el seminario ‘Análisis y Prospectiva del Sistema de Salud Colombiano’, evento organizado por el Centro de Investigaciones y Altos Estudios Legislativos (CAEL) y AFIDRO se presentó el estudio ‘El financiamiento del sistema de salud: Presupuestos Máximos’. Se trata de un análisis elaborado por Diana Cárdenas, exviceministra de Protección Social, exdirectora de la ADRES y economista.
Para garantizar la sostenibilidad del sistema de salud colombiano en 2025, será necesario un aumento significativo en los recursos destinados al sector. Se estima que al cierre de 2024, el déficit de financiación en servicios y tecnologías alcanzará los $3 billones de pesos, lo que implica que para 2025 se necesitará un aumento del 20% en los presupuestos para cubrir este déficit, es decir, entre $4.8 y $5 billones adicionales.
De acuerdo con Cárdenas, aunque el sistema ha logrado avances significativos, como la afiliación casi total de la población y la inclusión de migrantes, la asignación de fondos sigue siendo un proceso complejo. Los Presupuestos Máximos asignados a las EPS aún enfrentan dificultades en cuanto a su distribución y gestión. La falta de una metodología clara para establecer estos valores y su ejecución adecuada es un problema persistente, que genera incertidumbre en el sistema y pone en riesgo la sostenibilidad de la salud pública en el país.
“Nadie elige nacer con una enfermedad huérfana, pero todas las personas tienen derecho a una atención médica digna y a medicamentos especializados, seguros y eficaces. Aunque estas enfermedades son poco frecuentes, impactan profundamente la calidad de vida de quienes las padecen y de sus familias. Por ello, es fundamental que el Estado implemente estrategias que garanticen el acceso a medicamentos innovadores, asigne los recursos necesarios y fomente la investigación científica. Solo así será posible ofrecer un cuidado integral y equitativo que no deje a nadie atrás”, expresó Diana Cárdenas durante la presentación del estudio.
Urge replantear uso de Presupuestos Máximos dentro del sistema de salud
En su análisis, Diana Cárdenas abordó una situación que ha pasado por alto en el debate de la reforma a la salud. Los medicamentos para enfermedades huérfanas han ido perdiendo peso dentro de los Presupuestos Máximos, mientras que los costos asociados a productos y servicios complementarios, tales como pañales, cuidadores y transporte, han aumentado notablemente. Actualmente, estos servicios representan el 37% de este rubro, pero no se ha establecido con precisión quién debe financiar estos costos ni cómo asignar el valor correspondiente, lo que plantea una incertidumbre en la distribución de recursos para el sistema de salud.
Además de lo anterior, en lo que respecta a innovación, la exviceministra Cárdenas enfatiza en varios retos: la falta de claridad en los procedimientos para acceder a las tecnologías e insumos cubiertos por los Presupuestos Máximos (PM), lo que, a su vez, afecta la disponibilidad de tratamientos para los pacientes. También, la ausencia de mecanismos de financiamiento definidos para estos insumos también complica la gestión por parte de las EPS; en esa medida, es urgente que se implementen iniciativas que garanticen el flujo de fondos necesarios para estos presupuestos.
“Nadie puede frenar el acceso a la innovación cuando está en juego la salud. Es clave superar las barreras económicas y administrativas que hoy limitan este derecho fundamental”, añadió Cárdenas.
De cara al próximo año, el estudio enfatiza la necesidad de ajustar el cálculo de los Presupuestos Máximos (PM) para asegurar que los recursos sean suficientes para abordar las verdaderas necesidades de los colombianos. Si los valores no se alinean con la demanda real, el sistema de salud seguirá presentando limitaciones que obstaculizarán el acceso a la atención médica y afectarán la calidad de vida de la población.