Recientemente se conmemoró el Día Mundial de la Parálisis Cerebral, esta fecha busca crear conciencia sobre esta discapacidad que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es una de las más comunes en la infancia. En este contexto, el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) del Perú, que pertenece al Ministerio de Salud (Minsa), se ha destacado por ofrecer un tratamiento de rehabilitación integral con el principal objetivo de mejorar la calidad de vida de los pacientes, en especial de los niños.
La parálisis cerebral es un conjunto de desórdenes cerebrales derivados de una lesión en el sistema nervioso central, los cuales causan limitaciones en las actividades del paciente. Estas alteraciones, no progresivas, suelen ocurrir durante el desarrollo cerebral del feto o en los primeros años de vida. Se trata de una condición crónica que afecta la movilidad, la postura, la coordinación y puede impactar en distintas habilidades de desarrollo.
El Instituto Nacional de Rehabilitación ha demostrado un gran compromiso con estos pacientes, proporcionando miles de sesiones terapéuticas orientadas a mejorar su calidad de vida. De acuerdo con la Oficina de Estadística e Informática del INR, durante el periodo de enero a agosto de 2024, se brindaron un total de 854 atenciones en consulta médica y 4830 terapias a pacientes con diagnóstico de parálisis cerebral. Además, el 84.07% de las consultas médicas (718 atenciones) fueron cubiertas a través del Seguro Integral de Salud (SIS), mientras que el 15.92% restante (136 atenciones) se realizó mediante otros tipos de financiamiento.
El INR brinda atención personalizada para distintos grupos etarios
Uno de los aspectos más relevantes de la labor del INR es el enfoque personalizado y adecuado para cada grupo etario. Según los datos proporcionados, los niños de 0 a 11 años de edad constituyeron el grupo que mayor cantidad de terapias recibió, alcanzando las 4016 sesiones. Le siguieron los adolescentes (de 12 a 17 años) con 421 terapias, los jóvenes (de 18 a 29 años) con 266, los adultos (de 30 a 59 años) con 126, y finalmente los adultos mayores (de 60 años en adelante) con una atención.
El INR ha priorizado a los niños, debido a que el tratamiento temprano y la intervención temprana pueden marcar una gran diferencia en el desarrollo de los menores con parálisis cerebral, mejorando su calidad de vida y promoviendo su independencia. Las terapias son fundamentales para mejorar sus habilidades motoras y cognitivas, fomentando su inclusión en la sociedad desde una edad temprana.
Rehabilitación integral
La doctora Susan del Pilar Liviac Cabrera, jefa del Servicio de Apoyo Médico del Departamento de Investigación, Docencia y Rehabilitación Integral en Desarrollo Psicomotor del INR, señala que el principal objetivo de las terapias es mejorar la calidad de vida y la funcionalidad de los menores con parálisis cerebral. “Buscamos mejorar la movilidad para facilitar la independencia del niño. Además, consideramos estrategias que permitan estimular el desarrollo del habla o el uso de sistemas alternativos que mejoren la comunicación. También se fortalecen los músculos para mejorar la postura y la coordinación, y así prevenir complicaciones secundarias como contracturas o problemas ortopédicos”, explica la especialista.
“Es importante darle soporte emocional al niño con parálisis cerebral, con el fin de que pueda lograr insertarse en la sociedad de manera exitosa. Cada miembro del equipo cumple un rol fundamental para lograr avances en la rehabilitación de estos pequeños”, agrega Liviac Cabrera.
Recomendaciones para los padres de niños con parálisis cerebral
La rehabilitación de niños con parálisis cerebral no se limita al trabajo que se realiza dentro del INR; el apoyo y los esfuerzos de la familia en el entorno del hogar son igual de importantes. La doctora Liviac Cabrera ofrece algunas recomendaciones para los padres de familia de niños y niñas con parálisis cerebral:
- Fomentar el desarrollo sensorial y motor: Crear un ambiente en casa que estimule el desarrollo del niño a través del uso de juguetes que favorezcan su interacción y coordinación.
- Promover la comunicación: Utilizar formas de comunicación verbal o a través de imágenes, gestos y otros dispositivos de comunicación que favorezcan la expresión del niño.
- Fomentar la independencia: Estimular al niño a ser lo más independiente posible en sus actividades diarias, lo cual ayudará a fortalecer su autoestima y habilidades.
- Celebrar los logros: Reconocer cada avance, por pequeño que sea, para mantener la motivación y el optimismo en el proceso de rehabilitación.
- Ser paciente y flexible: Los progresos pueden ser lentos, y es fundamental tener paciencia y ajustar las expectativas según las necesidades de cada niño.
- Recordar la unicidad de cada niño: Cada pequeño es único, y lo que funciona para uno puede no ser adecuado para otro. Es importante ser flexibles y adaptarse a las necesidades particulares del niño.
Diversidad de sintomatología
Los síntomas de la parálisis cerebral pueden variar considerablemente de un paciente a otro. En algunos casos, puede afectar todo el cuerpo, mientras que en otros solo se limita a una o dos extremidades o a un lado del cuerpo. Los síntomas comunes incluyen problemas de movimiento y coordinación, dificultades en el habla y la alimentación, retrasos en el desarrollo, entre otros. La complejidad de los síntomas hace que cada caso sea único y requiera un enfoque personalizado para la rehabilitación.
El Día Mundial de la Parálisis Cerebral es una oportunidad para reflexionar sobre los retos y las oportunidades en la rehabilitación de estos pacientes. Con el apoyo adecuado y un tratamiento oportuno, los niños, adolescentes y adultos con parálisis cerebral pueden tener una mejor calidad de vida y alcanzar una mayor independencia.