La resistencia antimicrobiana (RAM) representa una amenaza sanitaria creciente a nivel global, poniendo en riesgo el tratamiento eficaz de infecciones causadas por bacterias, parásitos, virus y hongos, lo que podría resultar enfermedades más prolongadas y de mayor mortalidad. Esta problemática debe ser tratada con urgencia en la salud humana, la producción animal, agrícola y el en el ambiente en general.
Esta situación pone en riesgo la sostenibilidad de los sistemas agroalimentarios y con ellos la seguridad alimentaria. Es por ello, que cada vez más los gobiernos y las organizaciones sanitarias a nivel mundial generan acciones, estrategias y leyes que permitan combatir los microorganismos multirresistentes y la resistencia antimicrobiana convirtiéndolo en una prioridad de salud pública para los tomadores de decisiones y las partes interesadas.
Al año, miles de personas mueren por enfermedades ocasionadas por bacterias multirresistentes en el mundo, lo que aumenta la preocupación por esta problemática. Según organismos internacionales, se estima que en 2050 el número de muertes podría llegar a 10 millones de personas al año.
¿Qué hacen las organizaciones sanitarias mundiales frente la resistencia antimicrobiana?
Desde 2010, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) trabajan de forma coordinada para mitigar los riesgos en la salud humana, animal y del medio ambiente.
En mayo de 2015 la Asamblea Mundial de la Salud adoptó un Plan de Acción Mundial Sobre la Resistencia a los Antimicrobianos con el objetivo principal de asegurar el tratamiento y la prevención de enfermedades infecciosas con medicamentos de calidad garantizada, seguros y eficaces.
Las tres organizaciones han sumado fuerzas para la implementación del proyecto “Trabajando juntos para combatir la resistencia a los antimicrobianos” bajo el enfoque de Una Salud que reconoce la multidimensionalidad y la necesidad de una respuesta intersectorial, donde cada profesión o actividad laboral genera unas responsabilidades casi que innatas para la profesión veterinaria, entre otras.
El objetivo estratégico general de este proyecto apoyado y financiado por la Unión Europea es afirmar los esfuerzos para combatir la resistencia a los antimicrobianos a través de la implementación de los Planes de Acción Nacional de siete países: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay, Perú y Uruguay.
La OMS, a su vez, ha desarrollado directrices y recomendaciones para los países miembros para preservar la efectividad de los antimicrobianos de importancia crítica para la salud humana. Estas recomendaciones incluyen la Lista de antimicrobianos de importancia crítica (Critically Important Antimicrobials List – CIA List), que clasifica estos compuestos según su importancia y prioridad para la salud humana.
Este documento es un llamamiento a los gobiernos para que implementen políticas para alentar la investigación y el desarrollo de medicamentos, tanto a través de agencias del sector público como privadas.
¿Qué ha pasado en Colombia con la resistencia antimicrobiana?
En el Congreso de la República fue radicado un proyecto de ley que busca fortalecer la investigación científica y tecnológica en el sector salud para combatir los microorganismos multirresistentes y prevenir la resistencia antimicrobiana. A través de la creación de bases de datos, políticas estatales y planes de acción, que impulsen la generación de conocimientos, la adquisición de tecnologías y herramientas, y promuevan la colaboración intersectorial.
El eje del proyecto es la investigación intersectorial en el estudio y combate de la RAM, por lo que se propone la asignación de recursos a través del presupuesto nacional y, mediante estímulos fiscales. De esta manera Colombia podrá enfrentar esta problemática y contribuir a nivel mundial en la lucha contra los microorganismos multirresistentes y la resistencia antimicrobiana.
Además, se establece la creación de una Base de datos Nacional de Microorganismos Multirresistentes, que facilitará el acceso a la información sobre resistencia antimicrobiana en el país para los investigadores. También se plantea la formulación de una política estatal de investigación científica y tecnológica, orientada a la generación de nuevos conocimientos, adquisición de tecnologías y herramientas, y alimentación eficiente de la base de datos nacional.
Por último, propone la creación de una Comisión Intersectorial para el desarrollo de los planes, que será la instancia de coordinación y seguimiento entre los diferentes sectores involucrados. Este proyecto de ley tiene un amplio ámbito de aplicación que involucra a diferentes sectores y actores relacionados con la academia, el sector humano, animal, vegetal, alimentario, ambiental e industrial. Se busca que todas las partes interesadas colaboren de manera articulada.
Conozca y descargue el proyecto de ley a continuación:
