La población mundial ha aumentado más de 2,6 veces en los últimos 60 años. Esta tendencia creciente continúa: las proyecciones indican que el número de personas en nuestro planeta crecerá de 8 mil millones en 2022 a 9 mil millones para 2037. Estas cifras resaltan la necesidad de considerar la planificación familiar; sin embargo, ha habido avances limitados en anticoncepción en las últimas décadas. Específicamente para los hombres, no existen una píldora anticonceptiva disponible.
En un estudio publicado en la revista Science, investigadores del Baylor College of Medicine y otras instituciones colaboradoras muestran en modelos animales que un nuevo enfoque no hormonal y específico para los espermatozoides ofrece una opción prometedora para la anticoncepción masculina reversible en humanos.
“Aunque los investigadores han estado investigando varias estrategias para desarrollar anticonceptivos masculinos, todavía no tenemos una píldora anticonceptiva para hombres”, dijo el autor principal, el Dr. Martin Matzuk, director del Centro de Descubrimiento de Medicamentos y presidente del Departamento de Patología e Inmunología en Baylor. “En este estudio nos centramos en un enfoque novedoso: identificar una pequeña molécula que inhiba la serina/treonina quinasa 33 (STK33), una proteína que es específicamente necesaria para la fertilidad tanto en hombres como en ratones.”
Investigaciones previas han demostrado que STK33 está enriquecida en los testículos y es crucial para la formación de espermatozoides funcionales. En ratones, la eliminación del gen STK33 los vuelve estériles debido a espermatozoides anormales y baja motilidad espermática. En los hombres, tener una mutación en el mismo gen conduce a la infertilidad, causada por los mismos defectos espermáticos encontrados en los modelos animales del estudio. Lo más importante es que tanto los ratones como los hombres con estas mutaciones no presentan otros defectos y tienen un tamaño de testículo normal.
“Por lo tanto, STK33 se considera un objetivo viable con mínimas preocupaciones de seguridad para la anticoncepción en hombres”, dijo Matzuk. Añadió que “se han descrito inhibidores de STK33, pero ninguno es específico para STK33 ni lo suficientemente potente como para interrumpir químicamente la función de STK33 en organismos vivos.”
STK33: ¿el futuro de la píldora anticonceptiva masculina?
Utilizando la Tecnología de Química Codificada por ADN (DEC-Tec), el equipo de investigación identificó inhibidores potentes y específicos de la serina/treonina quinasa 33 (STK33), una proteína crucial para la fertilidad.
Entre los compuestos modificados, el CDD-2807 demostró ser el más eficaz. En ensayos con modelos murinos, el CDD-2807 atravesó exitosamente la barrera hemato-testicular, logrando reducir la motilidad y el número de espermatozoides, así como la fertilidad, con dosis bajas. Los ratones no dieron señales de toxicidad asociada, el compuesto no se acumuló en el cerebro y el tratamiento no alteró el tamaño de los testículos.
Un descubrimiento crucial fue que el efecto anticonceptivo era reversible. Tras un periodo sin CDD-2807, los ratones recuperaron tanto la motilidad como el número de espermatozoides, volviendo a ser fértiles. Además, el equipo de investigación presentó la primera estructura cristalina de STK33, lo que permitió diseñar compuestos con mejores propiedades farmacológicas, lo que sería un buen indicio para una píldora anticonceptiva masculina.