El presupuesto federal para 2022 contemplaba la construcción de 120 hospitales rurales, sin embargo, no hay recursos para ejecutar estas obras. En la actualidad, México cuenta con 80 hospitales rurales que hacen parte de la red de IMSS Bienestar y a los que sumarían los nuevos para completar 200 centros asistenciales que atenderían casos de segundo y tercer nivel de complejidad en las zonas apartadas de la región.
No obstante, según datos del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria -CIEP-, el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación si considera un aumento en los recursos que se le envían al IMSS Bienestar con el fin de reducir la brecha asistencial en la población de bajos recursos, pero en la práctica no hay cantidad específica para invertir en la infraestructura hospitalaria. Esto quiere decir, que probablemente la construcción de estos centros asistenciales no se concrete ya que no se sabe a ciencia cierta de donde saldrán los recursos para hacerlo realidad.
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Una nueva directriz en el país contempla que los servicios que prestan algunos hospitales rurales pasen a ser manejados por IMSS Bienestar, pero bajo un modelo de financiamiento del Insabi. Pero cientos de hospitales y clínicas en las ciudades pasarían a ser manejados también por el Insabi, de hecho varios centros asistenciales del Estado de Guerrero pasarán su red hospitalaria a la Federación, tal y como ha sucedido en Chiapas y Oaxaca. Este movimiento constituye un cambio abismal en el modelo de aseguramiento del país, más si se tiene en cuenta que muchos de los hospitales públicos mexicanos presentan irregularidades en el modelo de propiedad.
Algunos Gobernadores se han mostrado de acuerdo con la medida (ya que los hospitales públicos tienen enormes deudas que les impiden asegurar la prestación del servicio) sin embargo, que la deuda pase a ser absorbida por el Gobierno central, no parece ser la mejor opción. Algunos centros asistenciales que ya se acogieron a la medida y ahora son operados por el Insabi son el Central y el Soledad ubicados en San Luis Potosí, y también algunos de la ciudad de México entre los que se incluye el Hospital del Ajusco Medio.
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Los vaivenes de la salud en México
Algunos especulaban que Jorge Alcocer, secretario de salud de México, reversaría (una vez más) su decisión y apoyaría el censo de enfermedades raras en el país, sin embargo no ha hecho ninguna declaración al respecto, y mientras tanto el país continúa sin saber la cifra de pacientes con este tipo de enfermedades. La eliminación del censo, sin presentar una alternativa clara para vislumbrar el panorama de enfermedades huérfanas en el país discrimina a estos pacientes, que suelen tener una esperanza de vida más corta, y que no podrán acceder a tratamientos médicos porque se desconoce su situación.
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No obstante, mientras se detiene el registro de enfermedades huérfanas en México, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios -Cofepris- (esta entidad se asemeja al Invima en Colombia) lanzó la plataforma Digipris con la que digitalizará todos sus trámites y servicios. A través de esta se podrán todas las compañías que comercializan insumos médicos y medicamentos podrán hacer trámites en solo 5 minutos.
Apenas arrancó la primera de 5 etapas. Aquí lo relevante es que cada trámite de Cofepris tendrá trazabilidad, es decir, cada uno de los eslabones del proceso será transparente y se podrá verificar ante cualquier duda o requerimiento de información. Si verdaderamente Cofepris lo logra significará un control de procesos para entonces poder luchar contra la corrupción y la discrecionalidad en ese organismo regulador tan importante para la salud y la economía del país.
El lanzamiento de esta herramienta genera expectativa entre los actores ya que Cofepris es una de las entidades con más demoras en los trámites, por ejemplo la página de Cofepris Tracker de AMIIF reporta pendientes: 507 modificaciones a condiciones del registro sanitario, 172 prórrogas de registro sanitario, 353 trámites de protocolos de investigación clínica y 18 certificados de buenas prácticas, así como 11 trámites pendientes del comité de moléculas nuevas.
