* Por: Francisco Vélez, director general de Siemens Healthineers Colombia, Perú y Ecuador.
Llega el 2023 con expectativas y retos por abordar dentro de sectores que buscan mantener sus promesas de valor por el bien común. Pues bien, quisiera iniciar con uno de los más relevantes que no es para nada ajeno a nuestra labor: la interoperabilidad y seguridad informática. La pandemia trajo consigo un crecimiento de iniciativas sanitarias digitales, las cuales buscaron respaldar la información personal de los pacientes. Dada la vulnerabilidad que puede haber en estos, es extremadamente importante proteger los procesos y funciones de amenazas externas y posibles violaciones de datos.
Es por esto que, para este año es menester pensar en mejores estrategias para combatir esta problemática. Una alternativa es considerar una mayor inversión a salvaguardias para proteger los datos, o la autenticación multifactor y cortafuegos, los cuales se encargan de alejar a los piratas informáticos.
Lea otra columna de este autor: La adaptación de instituciones de salud a la innovación tecnológica como una herramienta de cuidado eficaz
Por otro lado, es necesario darle aprovechamiento a las bondades de la telemedicina, considerando su auge como uno de los servicios médicos básicos que cubre las necesidades de una gran cantidad de personas. Consecuente a la pandemia, ya no es necesario trasladarse a un hospital, ya que ahora es posible consultar a los médicos desde la comodidad de nuestros hogares. Sin embargo, es un gran reto para las diferentes entidades proveedoras de salud acoplarse a esta modalidad y tener la capacidad crear aplicaciones acordes a la telemedicina.
Asimismo, es necesario pensar constantemente en innovar y entregar tecnología de punta para los pacientes que lo necesiten, reconociendo el beneficio que se da a partir del manejo de condiciones médicas prevalentes: enfermedades cardiovasculares, neurovasculares o incluso el cáncer. Vemos en la innovación un apoyo al que podemos acudir para brindar un mejor servicio, un diagnóstico preciso y terapias más adecuadas, por ende, un mayor beneficio para el bienestar del paciente. La tecnología de punta garantiza llevar a cabo procesos más agiles, en donde los diferentes actores del sector salud se transforman y renuevan su equipamiento, para garantizar servicios más eficaces.
Le puede interesar: Precisión médica: la hoja de ruta del sector salud
También es clave reconocer que el acceso de tecnología médica y asistencia sanitaria en zonas remotas del país es uno de los retos más importantes. Por esto, es necesario:
- Prestar servicios sanitarios a todas las poblaciones, ampliando los servicios y la capacidad.
- Reducir sistemáticamente los gastos con costos predecibles y riesgos mínimos financieros.
- Proporcionar una experiencia de alta calidad a cada uno de los pacientes, con servicios y tecnología sanitaria adecuada.
- Planear y ejecutar las inversiones necesarias para reducir las brechas de acceso a las poblaciones mas vulnerables y con escaso o ningún acceso a las redes celulares o de internet satelital en Colombia.
Finalmente es importante adaptarse a los cambios para entender que las necesidades de nuestros pacientes están en una constante ruta de transformación, que estamos dispuestos a acompañar para que todas nuestras capacidades estén enfocadas en quienes acuden a nosotros para que se encuentren con un proceso de calidad que brinda el mejor servicio día a día. El 2023 viene acompañado de muchos retos y oportunidades de mejora. Este es un llamado entre el sector salud para acompañar y avanzar en conjunto de cara al bienestar del paciente.
No olvide leer: Consejo de Ministros culminó sin acuerdos sobre la reforma a la salud