Con el objetivo de superar barreras estructurales en el acceso a la salud materno-infantil, la Subred Sur Occidente de Bogotá implementó una estrategia de atención domiciliaria para mujeres en posparto y sus recién nacidos. La iniciativa ya muestra resultados positivos en adherencia a controles y prevención de complicaciones, particularmente en localidades con alta vulnerabilidad.
Una respuesta a la baja adherencia posparto en Bogotá
El sistema de salud público en Bogotá enfrenta el desafío constante de garantizar la continuidad del cuidado materno-infantil, especialmente tras el nacimiento. Entre las principales preocupaciones institucionales se encuentra la baja asistencia al primer control del binomio madre-hijo una etapa crucial para identificar riesgos, fomentar la lactancia materna y prevenir complicaciones en el posparto.
Frente a esta situación, la Subred Integrada de Servicios de Salud Sur Occidente, que atiende a más de un millón de personas en las localidades de Bosa, Kennedy, Fontibón y Puente Aranda, activó una intervención de atención domiciliaria que prioriza la consulta posparto en el hogar. Esta estrategia busca brindar un acompañamiento clínico y afectivo inmediato tras el nacimiento, fortaleciendo los lazos entre el sistema de salud y las familias beneficiarias.
Obstáculos detectados y respuesta institucional
“Durante el proceso, los equipos de salud detectaron múltiples obstáculos que dificultaban la asistencia a los servicios: limitaciones económicas, falta de tiempo y ausencia de redes de apoyo para el cuidado de otros hijos. Frente a esta realidad, se decidió fortalecer el trabajo de los equipos de atención en casa para llevar la consulta directamente a los hogares de estas familias”, explicó la gerente de la Subred Sur Occidente, Andrea Hurtado Neira.
El modelo contempla la visita conjunta de profesionales médicos y de enfermería, quienes realizan valoraciones clínicas de la madre y el recién nacido, orientan sobre lactancia materna, verifican esquemas de vacunación y evalúan condiciones del entorno familiar. Esta cercanía permite detectar tempranamente señales de alarma y promover prácticas de autocuidado adaptadas a la realidad del hogar.
Resultados preliminares: adherencia, confianza y oportunidad
Durante el piloto desarrollado entre enero y abril de 2025, se atendieron 81 binomios madre-hijo con resultados promisorios. Según el reporte técnico, la adherencia al seguimiento médico se incrementó sustancialmente respecto a las cifras históricas para esta etapa del ciclo materno-infantil en las localidades priorizadas.
Además, las madres beneficiadas han reportado altos niveles de satisfacción. una usuaria del programa, comentó: “Es muy bueno que el médico y la enfermera llegaran a mi casa a atendernos y cuidar a mi bebé. Así que estoy feliz con los controles y el seguimiento en casa”.
Este testimonio refleja un cambio en la percepción del servicio y en la relación entre el equipo de salud y la comunidad. Al eliminar barreras de desplazamiento, transporte y cuidado de otros hijos, se fortalece el enfoque de atención centrada en la persona y se estimula la construcción de confianza.
Humanización del cuidado y equidad territorial
Esta estrategia también se alinea con las metas distritales de promover una atención humanizada y territorializada. La atención en casa permite adaptar las recomendaciones médicas a la dinámica familiar, promover el empoderamiento de las madres en el cuidado de sus hijos, y generar alertas tempranas sobre determinantes sociales que inciden en la salud.
Desde la perspectiva del sistema, esta estrategia contribuye al logro de metas en mortalidad materna y neonatal, vigilancia del desarrollo infantil temprano y promoción de la lactancia exclusiva durante los primeros seis meses. Asimismo, reduce la presión sobre las salas de urgencias, al evitar que signos clínicos leves se conviertan en complicaciones severas por falta de seguimiento.
Proyección y escalabilidad de la estrategia
Aunque la estrategia está en su fase inicial, la Subred Sur Occidente proyecta su fortalecimiento y ampliación progresiva. Se espera que la evidencia recogida en estos primeros meses sirva como insumo para diseñar un modelo de atención domiciliaria permanente para el posparto inmediato, que pueda replicarse en otras regiones de Bogotá y del país.
El éxito dependerá de la sostenibilidad financiera, la formación continua de los equipos domiciliarios y el respaldo normativo a esta modalidad de atención. Sin embargo, la experiencia demuestra que acercar el sistema de salud al hogar no solo mejora indicadores técnicos, sino que transforma el cuidado en una experiencia más humana, oportuna y pertinente.