La Secretaría Distrital de Salud ha sido merecedora de un reconocimiento por parte del Instituto Nacional de Salud (INS) gracias a su excelente planificación, organización, dedicación y trabajo conjunto con la comunidad en la gestión de la emergencia de salud pública de importancia internacional del Mpox o viruela símica en la ciudad.
El INS resaltó el plan de respuesta implementado por el Distrito Capital frente a esta enfermedad, durante la reunión nacional de vigilancia en salud pública. Esta, ha permitido desarrollar una respuesta integral y que Bogotá avance en el control de esta enfermedad.
La ciudad pudo registrar indicadores favorables sobre esta enfermedad, debido al plan de respuesta del Distrito, el trabajo articulado y conjunto con diferentes entidades y con la comunidad, desde el mes de marzo y previo al fin de la declaratoria de la emergencia internacional por Mpox,
En Bogotá, hasta el 22 de mayo de 2023 se reportaron en total 1.980 casos confirmados de Mpox; las localidades más afectadas fueron Suba, Kennedy y Chapinero, con 31,38; 27,36; y 25,98 casos por millón de habitantes respectivamente. Actualmente hay cero casos activos. Desde el 28 de febrero no se notifican nuevos casos de la enfermedad.
Cabe recordar, que el virus de la viruela símica o Mpox se transmite por contacto directo con animales infectados o cadáveres que porten el virus, así como por contacto con la erupción cutánea de una persona contagiada. Además, existe la posibilidad de transmisión vertical de la madre al feto durante el parto. Es importante destacar que una persona infectada puede transmitir el virus hasta que sus lesiones cutáneas hayan cicatrizado y se hayan desprendido las costras.
En la capital se han implementado diversas medidas para el control de la enfermedad, entre las que se destacan la estrategia de comunicación de riesgo dirigida a la población general y de mayor vulnerabilidad, el desarrollo de acciones articuladas con dueños y administradores de sitios de aglomeración, hoteles, moteles y sitios de encuentro sexual, el desarrollo de capacidades con Organizaciones No Gubernamentales y de base comunitaria para identificación, diagnóstico y atención oportuna, así como eliminación de estigma y discriminación, la búsqueda activa de casos y contactos, el desarrollo de capacidades para diagnóstico oportuno por laboratorio y las intervenciones epidemiológicas de campo a través de los Equipos de Respuesta Inmediata (ERI), verificando el aislamiento de los casos hasta su recuperación y el seguimiento a sus contactos a fin de cortar las cadenas de contagio.
Estas medidas se han implementado con el fin de controlar la propagación del Mpox o viruela símica en la ciudad y han sido efectivas para lograr una disminución sostenida del número de casos confirmados. Además, existen dos vacunas aprobadas por la FDA para prevenir la infección de este virus. Estas vacunas pueden ser administradas antes o después de la exposición a la viruela, aunque su disponibilidad es limitada en la mayoría de los países. La Organización Mundial de la Salud considera que la vacunación masiva no es necesaria en la actualidad. Es importante seguir las recomendaciones de los expertos en salud pública en cuanto a la administración de la vacuna y las medidas preventivas para reducir el riesgo de infección.
La presentación clínica de la viruela símica puede variar de una persona a otra, incluso es posible que algunos pacientes sean asintomáticos. No obstante, las señales más frecuentes incluyen inflamación de los ganglios linfáticos, erupciones cutáneas en diversas áreas del cuerpo como la cara, palmas de las manos, plantas de los pies, boca, cuello, conjuntivas, córnea, ingle y regiones genital o anal, fiebre, escalofríos, cansancio intenso, dolor de cabeza y dolor muscular y de espalda. Es importante destacar que las situaciones graves se presentan con mayor frecuencia en mujeres embarazadas, niños y personas inmunosuprimidas.
¿Cómo prevenir el contagio de la viruela Símica?
Para prevenir el contagio, es necesario restringir el contacto con personas o animales que hayan sido diagnosticados con la enfermedad o que sean casos sospechosos de la misma. Además, se recomienda aumentar la limpieza y desinfección de superficies y entornos que pudieran estar contaminados con el virus, a fin de reducir la propagación de esta. Actualmente no existe un tratamiento específico. El manejo de la enfermedad dependerá de la aparición de los síntomas y su intensidad, y puede incluir tratamiento en el hogar o hospitalización en casos más graves.
El Comité de Emergencias del Reglamento Sanitario Internacional de la Organización Mundial de la Salud (OMS) comunicó el 11 de mayo de 2023 que el brote que afecta a varios países ha dejado de ser una emergencia de salud pública de importancia internacional, debido al descenso sostenido del número de casos. El director general del ente internacional aceptó la recomendación del Comité.
