Los retos de la salud en los primeros cien días del próximo gobierno quedaron expuestos en un comunicado oficial emitido por la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas (ACSC), en el que se advierte sobre el deterioro progresivo del sistema sanitario en Colombia y se cuestiona la efectividad de las soluciones planteadas tanto en la reforma del Gobierno como en las medidas recientes del Ministerio de Salud.
La organización señala que dichas actuaciones son “más proselitistas de cara a las próximas elecciones” que correctivos reales frente a la crisis. En un llamado urgente, el comunicado propone “hacer un pare” y volver a lo esencial: que cada actor del sistema contribuya de manera responsable a mitigar la emergencia y a construir un pacto social por la salud.
Un sistema único en crisis: cierres de servicios, quejas y riesgos para los pacientes
La ACSC enfatiza que el sistema de salud colombiano “es uno solo, independiente de quien sea el encargado de brindar la atención”, y por ello debe responder con calidad a cada ciudadano. Sin embargo, advierte que esta obligación se ve comprometida debido a una “caída libre” del sistema, expresada en el incremento de quejas y tutelas, en fallas recurrentes en la entrega de medicamentos y en reportes de asociaciones de pacientes que alertan sobre fallecimientos vinculados a la inoperancia del sistema.
En materia infraestructura y oferta de servicios, la ACSC expone un panorama crítico, de acuerdo con el comunicado: durante 2024 se cerraron 19.158 servicios en todos los niveles de atención, incluidos urgencias, mientras solo se abrieron 9.109, lo que deriva en un déficit neto de 10.049 servicios. Este deterioro impacta directamente al Talento Humano en Salud (THS), pues un servicio de baja complejidad emplea cerca de 20 trabajadores y los de mayor complejidad entre 80 y 100 o más.
La situación financiera no ofrece alivio inmediato “las finanzas del sistema no son las mejores, y no van a mejorar en el corto, y posiblemente, tampoco en el mediano plazo”, por lo que urge implementar medidas con los recursos disponibles para evitar un colapso mayor.
Apoyo al modelo de APS: especialistas respaldando al primer nivel
Entre los retos de la salud en los primeros cien días, la ACSC destaca la importancia de fortalecer la Atención Primaria en Salud (APS). Desde comienzos de 2025, la organización propuso a la Superintendencia Nacional de Salud modelos de atención para patologías de alto impacto como cáncer, enfermedades materno-fetales y EPOC.
La estrategia consiste en que especialistas brinden soporte continuo a médicos generales mediante telemedicina y telesalud, especialmente en zonas apartadas. La ACSC precisa que la iniciativa debe “generalizarse, reglamentarse y vincular formalmente a los especialistas” para garantizar su efectividad.
En paralelo, el comunicado cuestiona la propuesta gubernamental de incorporar masivamente médicos extranjeros, indicando que “esta no es la solución”, más aún cuando cada año se gradúan 6.000 médicos generales, existen 3.500 plazas disponibles, pero en 2025 solo se ocuparon 1.290, lo que evidenciaría una brecha de gestión y no de oferta profesional.
Servicio Social Obligatorio en residencias: especialistas para las regiones
El documento también propone implementar un Servicio Social Obligatorio (SSO) para residentes de especialidades básicas como medicina familiar, cirugía general, ginecobstetricia, anestesiología, medicina interna y psiquiatría. Esta práctica se realizaría en ESE públicas o clínicas privadas de zonas apartadas, con el fin de reducir brechas territoriales en acceso a especialistas.
No obstante, la ACSC advierte que, para garantizar la seguridad y calidad de la práctica, es imprescindible contar con infraestructura adecuada y condiciones laborales que permitan un ejercicio profesional digno.
Autorregulación y recertificación: mejorar calidad y reducir prácticas ineficientes
La ACSC retoma la importancia de las políticas de autorregulación profesional como herramienta para elevar la calidad de la atención. La recertificación voluntaria, implementada por la Asociación Consejo Colombiano de Acreditación y Recertificación Médica (CAMEC), permite que los profesionales “se mantengan actualizados en sus áreas de desempeño”, dando cumplimiento al principio de calidad establecido en la Ley Estatutaria de Salud.
Además, destaca el programa “Decisiones Acertadas”, liderado por la ACSC y el Dr. Ramón Abel Castaño, que define, con soporte técnico y evidencia científica, las conductas clínicas que deben eliminarse por ser obsoletas, ineficientes o riesgosas. La organización sostiene que los médicos pueden contribuir de manera directa al control del gasto mediante prácticas de prescripción responsable y la eliminación de intervenciones sin valor agregado.
Deudas con el Talento Humano en Salud: una omisión crítica del sistema
Uno de los puntos más sensibles del comunicado es la deuda acumulada con el THS. La ACSC señala que este es un tema “que nadie toca y está totalmente desprotegido”, pues las autoridades se concentran en pagos a IPS sin verificar si estas instituciones cumplen con sus obligaciones laborales.
Por ello propone que, dentro de las condiciones de habilitación y renovación, las IPS deban certificar (mediante representante legal y revisor fiscal) estar al día en pagos al THS, independientemente de la modalidad contractual. Este requisito debería ser obligatorio para el cierre anual.
Adicionalmente, en casos de intervención o liquidación, las IPS deberían priorizar el pago de deudas atrasadas con el talento humano, una medida que busca proteger a quienes sostienen la operación del sistema.
Un llamado a un pacto social para reconstruir el sistema
El comunicado concluye reconociendo que “el sistema está quebrado” y que su recuperación dependerá de acciones conjuntas entre todos los actores del sector. Entre los puntos adicionales que considera imprescindibles se encuentran:
- Rediseñar y asegurar adecuadamente los recursos del sistema.
- Implementar vigilancia estricta mediante auditorías.
- Ajustar la UPC sobre bases técnicas.
- Descentralizar funciones del INS, INVIMA e IETS, garantizando su independencia del Ministerio.
- Constituir reservas técnicas.
- Reconocer el papel esencial de todos los actores, incluido el THS.
La ACSC insiste en que los retos de la salud en los primeros cien días no se resolverán con medidas aisladas ni decisiones improvisadas, sino con una reestructuración seria, técnica y basada en evidencia.



