¡Es hora de actuar por la salud de los colombianos!
Como presidente de la ACSC quiero dirigirme a ustedes con profunda reflexión y compromiso en un momento en que enfrentamos desafíos cruciales para el liderazgo en nuestra sociedad, particularmente en el ámbito de la salud. La complejidad de los tiempos actuales, marcada por una crisis en ese liderazgo, nos llama a renovar nuestra responsabilidad colectiva y a replantearnos el verdadero significado de nuestra misión como agentes de cambio y formadores.
Envío esta carta abierta a todos los trabajadores de la salud especialmente a mis colegas médicos con el objeto de fortalecernos como gremio para poder afrontar estos momentos de crisis. Es vital que cada uno de nosotros, profesionales, técnicos, tecnólogos, auxiliares y estudiantes aporten su grano de arena para evitar el colapso del sistema. Es importante que tengamos claridad en el hecho de que solo nosotros podemos revertir esta situación, unidos por un bien mayor como lo es la salud de los colombianos. No podemos olvidar que fuimos, somos y seremos por nuestros pacientes, es por ellos y para ellos que debemos mirar al futuro, el cual actualmente no parece claro.
Debemos reivindicar la dignidad del talento humano en salud, la dignidad de todas las profesiones de la salud, la dignidad del médico y la dignidad de los pacientes. Juntos somos más, por eso invito a las agremiaciones de profesionales, a las facultades de medicina, a sus estudiantes que serán en el futuro cercano los profesionales del mañana, a las agremiaciones de pacientes y usuarios, a los prestadores del servicio público y privado y a todos y cada uno de los que hacemos parte del talento humano en salud a unirnos porque no podemos ser inferior a este reto.
Despoliticemos el discurso, sin pensamientos ideológicos, no somos oposición del gobierno somos el talento humano en salud, somos médicos y profesionales de la salud y la historia nos juzgará por cuanto defendimos lo que estudiamos, lo que nos gusta hacer, nuestra vocación.
Ante la divergencia de conceptos en torno a la reforma del sistema de salud, que genera intensos debates y, en ocasiones, desacuerdos profundos, es imperativo recordar que estamos unidos por un propósito superior: el bienestar de nuestra sociedad. Si bien es natural que existan diferencias de opinión, debemos procurar que estas se conviertan en puntos de encuentro y no en obstáculos para avanzar. La salud es un pilar esencial de nuestra humanidad. Somos los guardianes de este derecho fundamental, debemos asumir el desafío de alzar la voz no solo desde la experiencia clínica, sino también desde una ética que priorice siempre a las personas por encima de las estructuras. El liderazgo y la formación no solo se encuentra en la academia sino en el día a día y debemos formar futuras generaciones críticas y comprometidas, capaces de afrontar estas discusiones con rigor, empatía, fortaleza, pero sobre todo con sabiduría, principio que tanto hemos dejado de lado por estos días.
Desde la ACSC seguiremos encabezando esta y todas las luchas que deban darse por nuestros derechos y los de nuestros pacientes, ¿porque si no es ahora cuándo? Los invito a unirnos, es hora de actuar.
