Brasil ha logrado avances significativos en la lucha contra el VIH y el sida, consolidándose como un líder en la respuesta a esta epidemia en América Latina. Según el más reciente boletín epidemiológico del Ministerio de Salud, la mortalidad por sida alcanzó en 2023 su nivel más bajo desde 2013, con una tasa de 3,9%. Además, el país duplicó el número de usuarios de Profilaxis Pre-Exposición (PrEP) y cumplió metas clave de la ONU para eliminar el sida como un problema de salud pública.
En 2023, el país registró un aumento del 4,5% en los casos de VIH en comparación con 2022, lo que refleja un fortalecimiento en la capacidad de diagnóstico de los servicios de salud. Este aumento está asociado con una mayor oferta de pruebas y estrategias como la PrEP, que requieren exámenes de detección previos. Actualmente, el país ha alcanzado el 96% de diagnóstico de las personas que viven con VIH, superando la meta de la ONU del 95%.
La PrEP, distribuida de manera gratuita a través del Sistema Único de Salud (SUS), se ha convertido en una herramienta esencial en la prevención del VIH. Según Draurio Barreira, director del Departamento de VIH/Sida del Ministerio de Salud, en 2024 el número de usuarios de PrEP se duplicó, alcanzando los 109.000. “Este aumento ha permitido expandir exponencialmente la capacidad de diagnóstico y avanzar hacia la eliminación del sida como problema de salud pública para 2030”, destacó Barreira.
Impacto en las poblaciones clave, políticas públicas para personas con VIH
El perfil epidemiológico muestra que los hombres representan el 70,7% de los casos de VIH reportados en 2023, con una mayor incidencia en hombres que tienen sexo con hombres (43,9%). Además, el 63,2% de los casos se dieron en personas de raza negra o parda, y el grupo de edad más afectado es el de 20 a 29 años. Estas cifras subrayan la necesidad de diseñar políticas públicas inclusivas que aborden los determinantes sociales de la salud y las vulnerabilidades específicas de estas poblaciones.
En cuanto al sida, se registraron 38.000 casos en 2023, siendo la región Norte del país la que presentó la mayor tasa de detección (26%), seguida por la región Sur (25%). Boa Vista, Manaos y Porto Alegre lideran el ranking de ciudades con mayores tasas de detección.
Mortalidad en descenso: un logro histórico
También en el país se ha reducido significativamente la mortalidad asociada al sida. En 2023, se reportaron 10.338 muertes, pero la tasa de mortalidad estandarizada fue del 3,9%, la más baja desde 2013. Este descenso refleja los esfuerzos del gobierno por ampliar el acceso al tratamiento antirretroviral y mejorar la atención a los pacientes con VIH.
Brasil ha alcanzado dos de las tres metas clave establecidas por la ONU para eliminar el sida como problema de salud pública: el diagnóstico del 96% de las personas con VIH y la supresión viral del 95% en quienes están en tratamiento. Sin embargo, el 82% de los diagnosticados están en terapia antirretroviral, lo que plantea un desafío para alcanzar el objetivo del 95% en este indicador.
La ministra de Salud, Nísia Trindade, destacó la importancia de estos logros y subrayó que son fruto del diálogo con la sociedad civil y los movimientos sociales que han trabajado históricamente por la centralidad del VIH/sida en la agenda pública. Trindade señaló que el desafío ahora es reconectar a quienes han interrumpido su tratamiento y garantizar que todas las personas diagnosticadas reciban atención integral.
El programa Brasil Saludable: un modelo integral
La eliminación del sida como problema de salud pública para 2030 forma parte del programa Brasil Saludable, una iniciativa gubernamental que busca erradicar o controlar 14 enfermedades e infecciones que afectan desproporcionadamente a las poblaciones más vulnerables. Además del VIH/sida, el programa incluye enfermedades como la malaria, la tuberculosis y la hepatitis viral.
La pandemia de COVID-19 evidenció la importancia de la financiación pública en salud para responder a emergencias sanitarias. Ahora, Brasil enfrenta el desafío de fortalecer la resiliencia de su sistema de salud mientras satisface las necesidades de atención de su población en un entorno económico complejo.
El Ministerio de Salud ha señalado que continuará ampliando la oferta de insumos preventivos y terapias, así como mejorando el acceso a los servicios de salud para las poblaciones más vulnerables.