Reforma laboral 2025: ¿Qué se aprobó ya en el Senado y qué puntos siguen enfrentados?

En una extensa jornada de 12 horas, la plenaria del Senado de la República aprobó el 75% del articulado de la reforma laboral impulsada por el gobierno del presidente Gustavo Petro. De los 77 artículos del proyecto, ya se han aprobado 58, incluyendo medidas sobre contratos laborales, formalización de trabajadores, condiciones especiales de trabajo y ampliación de derechos.

La plenaria fue suspendida a las 8:59 p.m. del jueves 12 de junio y convocada para continuar el lunes 16 de junio, en lo que se espera sea la última sesión legislativa sobre esta iniciativa antes de su conciliación final. A la par, el presidente Petro firmó el decreto de convocatoria a una consulta popular para el 7 de agosto, medida que ha generado un nuevo frente de tensión institucional.

¿Qué cambios aprobó el Senado sobre los contratos a término fijo, la estabilidad laboral reforzada y la formalización del trabajo informal?

Entre los artículos más relevantes ya aprobados se destacan:

• Artículo 6: Establece que los contratos a término fijo solo podrán renovarse hasta por 4 años. Si se supera ese límite, el contrato deberá pasar a indefinido. Fue aprobado con 74 votos por el sí y 10 por el no, con respaldo transversal y con ponencia de consenso del senador Ariel Ávila.
• Artículo 13: Con 87 votos a favor, garantiza que no se requerirá permiso del Ministerio de Trabajo para pagar horas extras, medida que flexibiliza los procesos administrativos para los empleadores formales.
• Artículo 16: Regula la contratación de personas con discapacidad, aprobando que las empresas con más de 500 trabajadores deberán vincular una persona con discapacidad por cada 100 adicionales. La oposición del Pacto Histórico (senadoras Esmeralda Hernández y Jael Quiroga) pidió mantener la proporción anterior de 2 personas, denunciando un beneficio injustificado a grandes empresas.
• Artículo 19: Avala medidas contra la discriminación laboral, con 72 votos a favor. Aunque no fue objeto de debate amplio, refuerza el principio de igualdad en el acceso y permanencia en el empleo.
• Artículo 21: Reconoce como experiencia laboral válida las actividades productivas realizadas por personas privadas de la libertad. Fue aprobado con proposiciones adicionales que incluyen su certificación formal, con el objetivo de promover la resocialización y reducir la reincidencia.
• Artículo 36: Incluye medidas para formalizar el trabajo en microempresas y hogares, estableciendo que el Ministerio de Salud deberá reglamentar en 12 meses aspectos de licencias en tiempo parcial. También se aprobó que las droguerías deben prestar servicios nocturnos y de madrugada.
• Artículos 45 y 49: Se aprobaron disposiciones específicas para los artistas y trabajadores de la cultura, con reconocimiento de su condición laboral, y se fortalecieron los controles a las empresas de servicios temporales, que muchas veces actúan como intermediarios ilegales.

¿Qué artículos de la reforma laboral han sido rechazados y cuáles siguen pendientes en el Congreso?

Cabe mencionar que no todos los artículos han tenido respaldo. Algunos fueron negados o retirados por falta de consensos:

• Artículo 17 (prima por crecimiento económico): Fue rechazado con 61 votos en contra. Proponía que, si una empresa tenía un crecimiento anual superior al 4%, se pagara una prima a sus trabajadores, subsidiada parcialmente con reducción de impuestos. Senadores como Carlos Fernando Motoa alertaron sobre su impacto fiscal, mientras que el ponente Carlos Meisel insistió en que la medida no generaba impacto presupuestal directo.
• Artículo 37 (contratación por horas): Eliminado por recomendación del Ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, quien lo calificó como una “estrategia de precarización laboral” similar al criticado Piso de Protección Social. La eliminación fue celebrada por el Pacto Histórico, quienes advirtieron que permitir cotización por horas imposibilitaría el acceso real a pensión y salud.

Debates que continúan: trabajo rural, contratos sindicales, SENA y licencias

Jornal rural y trabajo campesino (Artículo 40)

Fue aprobado en la plenaria con proposiciones avaladas. El artículo busca incorporar al Código Sustantivo del Trabajo a los jornaleros agrícolas, otorgándoles salario mínimo, seguridad social y derecho a pensión. La senadora Aida Avella y el senador Robert Daza defendieron que “no hay trabajadores de primera ni de segunda categoría”. Sin embargo, hubo críticas desde la oposición, que calificaron la medida como un “engaño” que traslada el problema al Ejecutivo sin resolver el acceso real a pensión o salud.

Contrato de aprendizaje del SENA (Artículos 23 y 25)

Se mantiene abierto el debate sobre si el contrato de aprendizaje debe volverse laboral. Para Ariel Ávila, permitir que las empresas paguen sin contratar aprendices es “una aberración que acabaría con el SENA”. Por su parte, la senadora Clara López subrayó que “el SENA no es una universidad; allí hay productividad en la faena laboral”. La oposición teme que hacer obligatorio el carácter laboral lleve a una baja en la contratación de aprendices.

Licencias laborales: paternidad y menstrual

La licencia de paternidad, actualmente de 15 días, se propone ampliar a hasta 4 semanas. El debate gira en torno a quién asumiría el costo: mientras que algunos proponen que el ADRES lo financie, otros como el senador John Jairo Roldán advierten que es inviable fiscalmente.

La licencia menstrual ha sido uno de los temas más álgidos de la discusión. Solo aplicaría para mujeres con endometriosis certificada, pero esto fue criticado por la senadora Esmeralda Hernández por “profundizar el sesgo patriarcal”. Desde la oposición, la senadora María Fernanda Cabal la calificó como un “invento ideológico” que podría “discriminar a las mujeres en edad fértil”. La senadora Angélica Lozano pidió equilibrio para evitar incentivos a la contratación masculina.

¿Qué dice la reforma laboral sobre las empresas temporales, los contratos sindicales y el trabajo penitenciario?

• Artículo 49: Las empresas de servicios temporales serán sancionadas si exceden su rol. Se aprobó que si se sobrepasan los límites, la empresa usuaria será considerada el verdadero empleador. Clara López propuso eliminar ambigüedades, y Isabel Zuleta advirtió que no debe quitarse capacidad de fiscalización al Ministerio de Trabajo.
• Contratos sindicales: Aunque no se han votado aún artículos específicos, el senador Carlos Abraham Jiménez defendió su continuidad, reconociendo que “hay abusos, pero también buenos usos”. El senador Ariel Ávila sugiere que no deberían ser tocados en esta reforma.
• Trabajo en prisión: El artículo 21 ya aprobado permite que tres días de trabajo equivalgan a dos días redimidos de pena. Iván Cepeda y Sandra Jaimes lo ven como herramienta de reintegración. Otros senadores advierten que la redención penal debe ser competencia del Código Penal, no laboral.

Controversias en la votación y metodología

Durante el trámite del artículo 40 (jornal agropecuario), se presentaron acusaciones de “jugaditas” en la votación. Senadores denunciaron cambios de sentido del voto y presiones indebidas de los ponentes. La petición para reabrir la votación fue negada. También hubo fallas en el sistema electrónico, lo que obligó a realizar varios llamados a lista manual, alimentando el ambiente de tensión política y desconfianza entre las bancadas.

Entre tanto, la reforma laboral ha logrado un avance legislativo sin precedentes en los últimos años: el 75% del texto ya está aprobado y el resto se espera votar o conciliar el lunes. No obstante, los temas más sensibles, como la contratación por horas, la dignificación del trabajo rural, la formalización de madres comunitarias, y las implicaciones fiscales, siguen sin resolución plena.

A la espera de su votación final y de una eventual conciliación con la Cámara, la sombra de la consulta popular aparece como una herramienta de presión y participación a la vez. El desenlace de esta reforma no solo definirá las reglas del mercado laboral en Colombia, sino que pondrá a prueba la madurez institucional del Congreso y la legitimidad del Ejecutivo para transformar el país desde el empleo y la equidad.