La Secretaría de Salud de Bogotá manifestó su interés en ampliar el rango de la vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH), medida que fortalecería la eliminación del cáncer de cuello uterino, el cual se asocia con este patógeno. El anuncio se dio a conocer durante la instalación de la Mesa Territorial de Vacunación, realizada el pasado 21 de marzo en compañía des las Entidades Prestadoras de Servicios de Salud (EAPB), las Subredes Integradas de Servicios de Salud, las IPS y demás entidades distritales que participan en las políticas de salud pública.
Al respecto, el secretario de Salud, Gerson Bermont señaló que “está demostrado la seguridad y la efectividad de la vacuna, por ello resulta fundamental promoverla a temprana edad”. Agregó también que “desde 2012 el país cuenta con la inclusión de la vacuna que previene varios tipos de cáncer. Bogotá, a la fecha, cuenta con 44.042 dosis para niñas entre los 9 a 17 años y los niños de 9 años”. Cabe recordar que, aunque la población masculina no desarrolle cáncer de cuello uterino, sí puede ser portador del virus, de ahí la importancia de la inmunización también en los niños.
La evidencia científica ha demostrado que la vacuna contra el VPH es altamente segura. Actualmente, se considera una de las estrategias más efectivas para prevenir la infección por VPH, así como sus graves efectos, complicaciones y los cánceres asociados, especialmente si se administra antes del inicio de la vida sexual. Esto garantiza la protección antes del contacto con el virus a través de esta vía, aunque no exclusivamente.
Se debe tener presente que, el VPH no se refiere a un único virus. En realidad, la sigla reúne a n grupo de más de 200 virus relacionados que se dividen en bajo y alto riesgo. Los VPH de alto riesgo, como el VPH16, 18, 31, 33, 35, 39, 45, 51, 52, 56, 58 y 59, pueden causar cáncer o aumentar su probabilidad. Por otro lado, los de bajo riesgo incluyen el VPH6 y el VPH11, responsables del 90% de las verrugas anogenitales.
Según la Organización Panamericana de la Salud, el VPH16 y VPH18 son responsables del 70% de los casos de cáncer de cuello uterino, una de las principales causas de muerte en mujeres a nivel mundial. Este problema afecta la Salud Pública tanto globalmente como en Colombia, donde es la segunda causa de muerte por cáncer entre las mujeres. “El cáncer de boca, garganta, faringe y el cáncer de pene, son también algunos de los tipos que se relacionan con el VPH. Sin embargo, el cáncer de cuello uterino, que también es causado por este virus, es la segunda causa de muerte por cáncer en mujeres entre 30 a 59 años”, indicó el secretario Bermont.
Aumento de los grupos etarios para vacunación contra el VPH se suma a las estrategias globales
Para la Secretaría de Salud de Bogotá, las autoridades locales y nacionales deberían replantear las coberturas de vacunación contra el VPH, extendiéndolas hasta los 17 años en la población masculina. De acuerdo con Bermont, esta medida , desde una perspectiva de género, no solo ayudará a reducir la disparidad y promoverá una mayor corresponsabilidad entre todos, sino que también acelerará la disminución de la mortalidad en mujeres debido al cáncer de cuello uterino. Se espera ver los resultados de estos esfuerzos en los próximos 20 años, así como el impacto en otros tipos de cáncer causados por el virus que afectan tanto a hombres como a mujeres.
De acuerdo con datos presentados, “la ciudad cuenta con una cobertura de vacunación de VPH de 10,5% en niñas de 9 a 17 años y de 9,3% en niños de 9 años”. Por lo tanto, es crucial que la población tome conciencia sobre la importancia de la vacunación para reducir el riesgo de cáncer y también adopte hábitos saludables y prácticas que mejoren el pronóstico en caso de detección temprana, asegurando la oportunidad del tratamiento.
Por último, es fundamental mencionar que, la vacunación contra el VPH sigue la propuesta de la OMS denominada 90-60-90, creada para erradicar el cáncer de cuello uterino:
- El primer componente busca alcanzar una cobertura del 90% en la vacunación contra el cáncer de cuello uterino en niñas antes de los 15 años.
- En segundo lugar, se busca lograr una cobertura del 70% en el tamizaje con prueba de ADN del virus del papiloma humano en mujeres, con especial énfasis entre los 35 y 45 años.
- Por último, se aspira a alcanzar un 90% de inicio oportuno y adherencia al tratamiento en lesiones precancerosas y cáncer de cuello uterino.