Luego de que el Gobierno Nacional radicara un nuevo proyecto de ley de reforma a la salud ante la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, varios actores del sector se pronunciaron para dar a conocer su perspectiva frente a esta propuesta que ha generado fuertes controversias. Por su parte, la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas (ACSC) que agrupa a más de 70 especialidades médica del país, fue una de las primeras en pronunciarse asegurando que dicha reforma “evidencia que nuevamente el Gobierno Nacional desconoce la participación y la necesidad de concertarla con los distintos actores y gremios del sector”.
El presidente de ACSC, Agamenón Quintero indicó “vuelve y juega”, tras recordar el reciente pronunciamiento que hizo junto a la Sociedad Colombiana de Anestesiología y Reanimación el pasado 28 de agosto, donde manifestaron que luego de varias reuniones sostenidas con el Minsalud aún persistían muchas diferencias que debía ser discutidas en el trámite legislativo.
Asimismo, la asociación indicó que insistir en un sistema estrictamente público y también convertir a la ADRES en una entidad polifuncional con competencias que difícilmente podría ejercer incluso a mediano plazo, genera incertidumbre sobre el presente y el futuro del sistema de salud. De otro lado, la inclinación por el fortalecimiento de la red pública donde el 80% o más del servicio es prestado por entidades privadas, hace que dicha propuesta presentada por Minsalud sea menos creíble.
Reforma a la salud sin garantías para el pago de deudas y sin mejoras para el talento humano, según la ACSC
La ACSC revisó el documento del proyecto que contempla 49 artículos y en la primera revisión evidenciaron que persiste la falta de financiamiento de la propuesta, así como la vigilancia y control de los recursos del sistema no son claros. También enfatizaron en que, aunque la norma no genera compromisos para el saneamiento de las deudas actuales, no se crea como tal una garantía para que los responsables cumplan con los pagos adeudados.
Otro de los puntos cuestionados por la asociación es la deuda la deuda histórica que el Estado colombiano tiene con el Talento Humano en Salud. “No hay una propuesta cierta para el mejoramiento de las condiciones generales, personales, profesionales, ni laborales, y aunque el artículo 40 del proyecto plantea la creación de un régimen especial para los trabajadores de la salud, la iniciativa desconoce la participación necesaria de agremiaciones como la ACSC”.
De esta manera, Quintero expresó que la radicación a puerta cerradas del proyecto de reforma a la salud es una muestra clara y contundente de que el contenido del documento no responde a un consenso ni recoge las propuestas hechas por sectores claves como lo es el talento humano en salud, quienes son uno de los actores importantes que están involucrados en la atención al paciente.
Finalmente afirmó que las diferencias presentadas por el titular de esta cartera no son mínimas, son de forma y de fondo. “La mejor alternativa para mejorar el Sistema de Salud de los colombianos es reconocer la Ley Estatutaria 1751 de 2015, por la cual se regula el derecho fundamental a la salud y que está vigente desde hace nueve años, la cual se puede reglamentar a través de leyes ordinarias, decretos o resoluciones, pero con la participación de todos los actores.”, aseguró Quintero.
Es importante mencionar quew La reforma a la salud introducirá un enfoque territorial y diferencial, estableciendo redes integradas de servicios para asegurar la cobertura de atención primaria en todo el país. Los Centros de Atención Primaria en Salud (CAPS) y los Equipos de Salud Territorial estarán en primera línea, ofreciendo atención cercana a las comunidades, reduciendo las inequidades y respondiendo a las necesidades locales. Además, la transformación de las Entidades Promotoras de Salud (EPS) en Gestoras de Salud y Vida mejorará la coordinación y eficiencia en la prestación de servicios, reduciendo tiempos de espera y facilitando el acceso a la atención médica para millones de colombianos.
