La Superintendencia Nacional de Salud reveló los resultados de visitas de auditoría realizadas en Bogotá y Santander, debido a que la ciudadanía reportó incidentes asociados a los procesos de vacunación. Entre las novedades se encuentran más de 300 personas vacunadas de forma irregular en la capital del país, 1 individuo en Bucaramanga y alertan sobre 59 casos posibles adicionales.
Ante la gravedad de la situación, el ente de control decidió trasladar para investigación administrativa los hallazgos a otras entidades (Fiscalía General de la Nación, Secretaría de Salud de Bogotá y Procuraduría General de la Nación) para que se lleven a cabo las pesquisas respectivas y se determinen las respectivas sanciones para quienes resulten implicados en estos procesos.
“No podemos generalizar que estas situaciones se estén presentando en todo el país, ¡pero aquí nadie puede fallar! Y no me refiero solamente a los actores de la salud, sino también a los usuarios, servidores públicos, contratistas y particulares que deben respetar los criterios establecidos, especialmente, en el turno de asignación para cada etapa”, afirmó el superintendente Fabio Aristizábal al dar a conocer esta información públicamente.
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395 personas vacunadas irregularmente en Bogotá
De acuerdo con las investigaciones de la Superintendencia Nacional de Salud, las personas que fueron vacunadas irregularmente en la capital hacen parte de la Subred Norte. De ellos, 142 pertenecen al personal administrativo de la Subred y los restantes 253 eran parte del Plan de Intervenciones Colectivas (PIC).
El ente de control, según la información identificada en la auditoría, no realizó una adecuada priorización del personal de salud en la primera etapa de vacunación conforme con los criterios de priorización establecidos en el numeral 7.1.1. del artículo 7 del decreto 109, de 29 de enero de este año, expedido por el Ministerio de Salud. Incluso, como consta en los registros de la Subred, al menos 16 de estas personas recibieron la primera dosis el día inicial de la vacunación en Bogotá, es decir el 18 de febrero.
Además de estos preocupantes hallazgos, la auditoría reveló las siguientes irregularidades, también asociadas con el proceso de inmunización en Bogotá:
- La Subred no contaba con talento humano destinado exclusivamente para la vacunación Covid-19, ni certificación que acredite el entrenamiento para la aplicación de la vacuna. Además, parte del personal de vacunación no contaba con contratación vigente.
- No cuenta con un proceso definido para el agendamiento de vacunación contra el Covid-19.
- La Subred no contaba con la autoevaluación para la renovación de habilitación del servicio de vacunación, y este se encuentra vencido desde el 25 de noviembre de 2020. Así mismo, la Subred dispone de puntos adicionales de vacunación contra el Covid-19 sobre los que no han realizado el registro de habilitación transitoria.
- No cuenta con protocolo y ruta definida para el manejo y disposición de residuos provenientes de la vacunación contra Covid-19.
- No cuenta con protocolo, ni ruta para el manejo de los eventos adversos derivados de la vacunación.
- Presenta deficiencias en la calidad de la información que sustenta los datos reportados de la población vacunada.
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En Bucaramanga, el caso irregular proviene de un profesional de la salud
Con respecto a las denuncias ciudadanas y a las investigaciones sobre la vacunación irregular de un cirujano plástico, la Superintendencia Nacional de Salud corroboró dicha información. De acuerdo con sus auditorías a la Fundación Oftalmológica de Santander (Foscal) y la Fundación Fosunab, con sedes en Bucaramanga y Floridablanca (Santander) se encontró lo siguiente:
- El cirujano plástico no hacía parte de la población que estaba altamente expuesta al Covid-19, por lo que no podía ser clasificado en la Etapa 1. Con su vacunación, las clínicas aparentemente desconocieron el protocolo impuesto por el Ministerio de Salud para la inmunización del talento humano.
- La Superintendencia Nacional de Salud halló que el cirujano no fue postulado ni inscrito por la Foscal ni por Fosunab para ser vacunado, ya que no cuenta con vinculación vigente con ninguna de estas clínicas.
- Se encontró que las dos IPS habrían desconocido sus obligaciones frente al agendamiento de citas y verificación de la priorización para la vacunación, así como la presunta omisión de cotejar si el cirujano se encontraba o no en la base de datos.
- La Foscal no dio respuesta a la totalidad de los requerimientos realizados por la Supersalud.
Además de ello el ente de control solicitó a los Tribunales de Ética Médica y a los diferentes Tribunales Éticos de las áreas de la salud iniciar las investigaciones sobre los profesionales involucrados en este tipo de casos.
De igual forma, la Superintendencia Nacional de Salud informó que en total hay 59 casos bajo investigación. De ese total, 7 se encuentran cerrados, 30 están en curso (con requerimientos y/o visita), 12 en seguimiento de las actuaciones administrativas iniciadas por las entidades territoriales, 8 en proceso de inicio de actuaciones y 2 trasladadas a Procesos Administrativos de la Supersalud y a los entes de control.
“Todos tenemos un gran compromiso de responderle al país en este reto de la vacunación y por eso mi invitación es a respetar valores como la ética y la moral, y atributos como la bondad, para que no utilicemos atajos ni nos saltemos la fila. Por favor respetemos los criterios y los plazos que ya están definidos”, señaló finalmente el Superintendente Nacional de Salud, Fabio Aristizábal Ángel.
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