Para que los especialistas médico quirúrgicos puedan seguir desempeñando estas funciones, es necesario que las reporten en el Registro Único de Talento Humano en Salud (ReTHUS) y tengan actualizada esas inscripciones, según informó el Ministerio de Salud (Minsalud).
En ese sentido, Gabriel Bernal Pulido, director de Talento Humano en Salud del Ministerio, hizo un llamado a los médicos a que registren sus especialidades.
“Hacerlo oportunamente permitirá que la prestación de servicios de salud se ejerza bajo las normas y leyes colombianas”, precisó Bernal.
¿Cuántos especialistas MÉDICO QUIRÚRGICOS hay?
El más reciente dato de 2018 indica que en el ReTHUS están registrados 14.500 especialistas medico quirúrgicos de los 24.700 reportes que tiene Minsalud.
Lo anterior quiere decir que 45%de los especialistas en Colombia ha omitido su deber de reportar obligatoriamente su especialidad, para poder ejercer en el país.
“Si una persona ejerce una especialidad médico quirúrgica y no hay registro en el ReTHUS, estará ejerciendo ilegalmente la profesión. Esta inscripción solo aplica para las profesiones y ocupaciones en salud que se consideran talento humano en el sector”, indicó Bernal.
Además, que un especialista esté registrado, les permitirá a los usuarios mantenerse correctamente informados sobre la libre elección del prestador de servicios de salud.
“De esta forma garantizamos el pleno ejercicio del derecho a la salud y el Gobierno nacional cumple su misión de planear y estimar las necesidades de talento humano en salud en cada territorio”, agregó Bernal.
Asimismo, estar debidamente registrado en el ReTHUS les permitirá a los especialistas médico quirúrgicos acceder y utilizar las plataformas tecnológicas de prescripción en línea, como MIPRES, para validar los datos que se reportan respectivamente al Ministerio de Salud.
Juntas de profesionales
Además, las Resoluciones 1885 y 2438 de 2018 del Minsalud, indican que las Juntas de Profesionales de Salud deben conformarse con al menos tres profesionales inscritos en ReTHUS.
Estas juntas deben decidir respecto de las prescripciones de tecnologías en salud no financiadas con recursos de la UPC.