En medio de una crisis económica y social que ha afectado profundamente a Líbano, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), junto con el Ministerio de Asuntos Sociales y UNICEF, ha lanzado una serie de medidas de emergencia para apoyar a las personas con discapacidad que se han visto gravemente afectadas por el conflicto en curso. Estas acciones, que forman parte del Programa Nacional de Subsidios para Discapacitados (NDA), proporcionan asistencia financiera directa a más de 27.000 personas con discapacidad, en un esfuerzo por mitigar el impacto devastador de la crisis humanitaria.
Respuesta inmediata ante la crisis
Líbano ha enfrentado una serie de desafíos en los últimos años, desde crisis económicas hasta tensiones políticas y sociales exacerbadas por la pandemia de COVID-19 y el conflicto regional. Las personas con discapacidad se encuentran entre los grupos más vulnerables, debido a la falta de acceso a servicios básicos y al impacto desproporcionado que la crisis ha tenido en sus vidas. Ante esta situación, el Ministerio de Asuntos Sociales, en alianza con la OIT y UNICEF, ha implementado una serie de medidas para proporcionar asistencia inmediata y aliviar la situación de emergencia de miles de personas con discapacidad.
La iniciativa, enmarcada en el Subsidio Nacional para Discapacitados, actualmente recibe apoyo de la Unión Europea y los Países Bajos, y busca proporcionar ayuda directa en efectivo. Esta asistencia incluye un pago único de emergencia de 100 dólares a los 5,000 beneficiarios actuales del programa que residen en las zonas más afectadas por el conflicto. Además de adelantar el desembolso de los pagos mensuales regulares a los beneficiarios del NDA, se está priorizando la expansión del programa a otras personas con discapacidad que no están actualmente inscritas.
Impacto del conflicto en las personas con discapacidad
Según estimaciones de la OIT, más de 30.000 personas con discapacidad en Líbano se han visto directamente afectadas por la crisis, y requieren asistencia urgente. En este contexto, la respuesta humanitaria se vuelve crítica para garantizar que estas personas reciban el apoyo necesario no solo para sobrevivir, sino también para preservar su dignidad y derechos. Ruba Jaradat, Directora Regional de la OIT para los Estados Árabes, destacó la importancia de este esfuerzo durante una conferencia de prensa, enfatizando el compromiso de la OIT en brindar asistencia continua.
“La OIT se ha comprometido a proporcionar asistencia para permitir la prestación continua de servicios a personas con discapacidad en Líbano y a apoyar al Ministerio de Asuntos Sociales en la identificación y evaluación de las necesidades”, señaló Jaradat. Este compromiso incluye la identificación de personas con discapacidad que no estén actualmente registradas en el NDA, lo cual se llevará a cabo en conjunto con el Ministerio de Asuntos Sociales y la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastres de la Presidencia del Consejo de Ministros.
Ampliación gradual y retos financieros
Aunque la primera fase de esta iniciativa se enfoca en los beneficiarios actuales del NDA, la OIT y sus socios planean ampliar la asistencia a personas con discapacidad de otros grupos de edad y nacionalidades, en la medida que los recursos lo permitan. La respuesta total a esta crisis humanitaria requerirá una inversión significativa, estimada en aproximadamente 6 millones de dólares. Hasta el momento, los esfuerzos para asegurar los fondos necesarios continúan, con el apoyo de socios internacionales para el desarrollo.
A medida que se dispongan de más recursos, la OIT buscará extender esta asistencia más allá de las personas registradas en el NDA, abarcando a aquellos que han sido desplazados por el conflicto y a quienes no han tenido acceso a programas de apoyo previos. La expansión de estas medidas es fundamental para garantizar una respuesta inclusiva que atienda las necesidades de las personas más vulnerables en el país.
Plan de respuesta integral
El Plan de Respuesta de Emergencia de la OIT no se limita únicamente a proporcionar asistencia financiera. Como parte de este plan más amplio, la organización trabaja en colaboración con las autoridades nacionales y otros socios clave, incluidas agencias de la ONU, para promover la protección social y crear oportunidades de empleo digno y sostenible. Este enfoque integral busca no solo mitigar el impacto inmediato de la crisis, sino también sentar las bases para una recuperación a largo plazo.
La creación de oportunidades de trabajo decente para las personas con discapacidad en Líbano es uno de los objetivos clave del plan de la OIT. En este sentido, la organización tiene como meta colaborar con el sector público y privado para facilitar la inclusión laboral y asegurar que las personas con discapacidad tengan acceso a oportunidades económicas, a pesar de las dificultades actuales.