El Ministerio de Salud y la Superintendencia Nacional de Salud confirmaron la prórroga de la intervención forzosa administrativa a Asmet Salud EPS hasta mayo de 2026. La medida se adopta ante los pendientes críticos en su plan de recuperación y mantiene bajo escrutinio a una EPS con más de 1.5 millones de afiliados en 12 departamentos del país. Este artículo analiza el impacto estructural de esta decisión, los desafíos en la operación de la EPS y las implicaciones para el sistema de salud colombiano.
Contexto regulatorio y razones de la prórroga
Mediante la Resolución 153 del 9 de mayo de 2025, el Ministerio de Salud prorrogó por un año adicional hasta el 11 de mayo de 2026 la intervención forzosa administrativa a Asmet Salud EPS, inicialmente decretada con el objetivo de corregir fallas estructurales en su operación financiera, asistencial y administrativa.
La decisión se fundamenta en el análisis de la Superintendencia Nacional de Salud, entidad que concluyó que existen ítems pendientes del plan de trabajo aprobado durante la fase inicial de la medida, los cuales no han sido resueltos de forma satisfactoria.
Aunque al momento de la intervención, Asmet Salud EPS contaba con alrededor de 2 millones de afiliados, la cifra actual según datos oficiales es de 1,5 millones de usuarios, de los cuales 1,4 millones pertenecen al régimen subsidiado y 67.000 al contributivo. La EPS mantiene operación en 12 departamentos y Bogotá.
Estructura de afiliación y cobertura territorial
Asmet Salud EPS opera actualmente en los departamentos de Caldas, Caquetá, Cauca, Cesar, Huila, Nariño, Norte de Santander, Quindío, Risaralda, Santander, Tolima, Valle del Cauca y la ciudad de Bogotá. Esta distribución refleja su relevancia dentro del aseguramiento de la población más vulnerable, particularmente en zonas rurales y de difícil acceso.
Distribución actual por régimen:
- Régimen subsidiado: +1.400.000 afiliados
- Régimen contributivo: ~67.000 afiliados
La amplia cobertura y su peso poblacional hacen de Asmet Salud EPS una pieza clave en el ecosistema de aseguramiento, especialmente para municipios categoría 5 y 6, donde muchas veces es el único asegurador disponible.
Balance de la intervención: avances y pendientes
Durante el proceso de intervención, la EPS ha mantenido su operación con apoyo de una agente especial interventora, quien continuará en funciones según lo dispuesto por el Ministerio de Salud.
En su más reciente comunicado, la EPS expresó su intención de brindar tranquilidad al sistema y a sus afiliados, reafirmando el compromiso con el uso eficiente de los recursos, el respeto a los lineamientos regulatorios y la mejora del relacionamiento con la red prestadora.
Sin embargo, el balance aún no es favorable en aspectos clave:
- Persisten retrasos en el flujo de recursos hacia la red prestadora.
- Las tasas de oportunidad y calidad en la atención siguen por debajo del estándar.
- Los mecanismos de auditoría y control interno requieren fortalecimiento.
- Hay debilidades en la articulación con entidades territoriales y vigilancia epidemiológica.
El enfoque del Gobierno Nacional: sostenibilidad, vigilancia y goce efectivo del derecho a la salud
El Gobierno Nacional ha hecho énfasis en que las intervenciones forzosas administrativas no deben percibirse únicamente como mecanismos de sanción, sino como herramientas técnicas de recuperación institucional. En este sentido, el enfoque de la intervención sobre Asmet Salud busca asegurar:
- El goce efectivo del derecho a la salud de los usuarios.
- La correcta destinación de los recursos del sistema, garantizando que lleguen a prestadores y pacientes.
- La estabilidad operacional y financiera que permita la continuidad del aseguramiento.
Según lo señalado en la resolución, la agente especial deberá presentar informes periódicos de gestión, incluyendo el cumplimiento del cronograma de acciones correctivas, indicadores de oportunidad, satisfacción y gestión financiera, con el objetivo de permitir la evaluación constante del avance.
¿por qué aún no se levanta la intervención?
De acuerdo con antecedentes documentados en otras EPS intervenidas, una prórroga puede responder a distintos factores estructurales:
- Debilidad en los sistemas de información: dificultad para auditar el cumplimiento de metas.
- Alta concentración del riesgo asistencial en ciertos departamentos sin red suficiente.
- Pasivos acumulados con prestadores que impiden normalizar el flujo financiero.
- Falta de gestión territorial para operar en entornos con baja oferta o problemas de orden público.
Además, la reducción de su población afiliada en 500.000 personas puede haber implicado una reestructuración de red y modelo operativo, lo que dificulta la recuperación de algunos indicadores clave en los tiempos inicialmente establecidos.
¿Qué debe garantizar Asmet Salud durante esta prórroga?
De acuerdo con la normatividad vigente (Decreto 780 de 2016), una EPS bajo medida de intervención debe demostrar:
- Recuperación progresiva de los indicadores financieros.
- Satisfacción de la red de prestadores.
- Continuidad y calidad en la atención de los usuarios.
- Implementación de sistemas de auditoría y gestión del riesgo.
- Cumplimiento de las rutas de atención y MIPRES.
El gran reto será traducir los compromisos en resultados medibles y verificables, especialmente en contextos donde los pacientes han denunciado barreras de acceso, negación de servicios o demoras prolongadas en la atención especializada.
Perspectivas a mediano plazo: ¿rescate o liquidación?
La prórroga de la medida abre un año crítico para el futuro de Asmet Salud EPS. Si no demuestra mejoras estructurales sostenibles, podría enfrentarse a:
- Una eventual decisión de revocatoria parcial o total del funcionamiento.
- La activación de procesos de liquidación como ya ocurrió con otras EPS.
- La reorganización o integración forzosa en otras aseguradoras si se considera inviable su recuperación.
El Ministerio de Salud y la Superintendencia Nacional de Salud deberán evaluar, con base en informes periódicos y criterios técnicos, si es factible una salida institucional ordenada o si debe optarse por medidas más drásticas.
Vigilancia activa y evaluación con evidencia
La prórroga de la intervención a Asmet Salud EPS marca un momento decisivo para una de las entidades más representativas del régimen subsidiado en Colombia. Aunque ha logrado mantener su operación, los indicadores que motivaron la medida aún no han sido superados del todo.
Para el sector salud, esta situación debe entenderse como un laboratorio de política pública sobre la capacidad del sistema para rescatar EPS en riesgo, sin comprometer la continuidad, calidad y sostenibilidad del aseguramiento en salud.