En la Universidad Rey Juan Carlos, España, se llevó a cabo la primera edición de Muy IA Trends Executive Update, una iniciativa innovadora para abordar los desafíos emergentes que plantea el uso de la IA en el sector de la salud, donde participaron varios expertos que dieron a conocer las experiencias y los desafíos actuales sobre la intersección de la inteligencia artificial y el sector salud.
En esta edición, Julio Mayol, director del grupo de Innovación del Instituto de Investigación Sanitaria San Carlos (IdSSC), abordó cómo los pacientes se benefician de los avances prácticos de la IA en el ámbito de las enfermedades y cuáles son sus expectativas para el futuro próximo. En primer lugar, destacó la revolución impulsada por esta tecnología generativa al facilitar a los pacientes el acceso directo a información biomédica y de salud de manera rápida y personalizada. Sin embargo, lamentó que aún no se haya validado la calidad del conocimiento compartido a través de esta tecnología.
“La capacidad de los sistemas de IA para interpretar y explicar datos médicos complejos va a impactar significativamente en la toma de decisiones, tanto para profesionales de la salud como para los pacientes, y este avance trae consigo desafíos éticos y prácticos, desde la privacidad de los datos, la exactitud del diagnóstico, y la necesidad de mantener una relación médico-paciente apropiada y basada en la confianza” aseveró Mayol.
La revolución de la IA en la salud
Por su parte, Cristóbal Belda, director del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), reconoció el cambio de paradigma que ha introducido la tecnología en la atención médica a nivel mundial y en la práctica clínica diaria; y a su vez, destacó cinco áreas fundamentales en las que la inteligencia artificial puede brindar ayuda: fragilidad y edades extremas, determinantes sociales y culturales, impacto en la forma de enfermar; cambio climático, enfermedades emergentes y nuevas zoonosis; gestión masiva de datos de salud, edición génica y terapias avanzadas; y, por supuesto, la sostenibilidad de los sistemas sanitarios.
Del mismo modo, el doctor Belda ha desvelado cuál es el gran reto al que se enfrenta el sector de la salud con esta tecnología, la desinformación. “La diferencia entre lo verdadero y lo falso pone en peligro el derecho a la información”.
Entre los expertos más destacados, Benigno Rosón, subdirector general de Sistemas y Tecnología de la Información de la Consejería de Sanidad de la Xunta de Galicia, abordó la integración de la inteligencia artificial por parte de los operadores sanitarios para mejorar la práctica clínica, los procesos, la accesibilidad y la gestión. Enfatizó en el reciente plan aprobado en Galicia, el cual implementa distintas iniciativas e inversiones significativas en este ámbito, evidenciando el compromiso con la adopción de la IA para el avance en la atención médica y la eficiencia en la gestión sanitaria.
“La IA y la gestión inteligente de los datos jugarán un papel muy importante en el desarrollo de la salud y transformación digital en todas las comunidades autónomas. En esta apuesta, Galicia incide también en una adecuada gobernanza y por ello ha creado el pasado mes de octubre el Consejo Técnico Asesor en Inteligencia Artificial y Espacio de Datos del Sistema Público de Salud de Galicia”, señaló el doctor Rosón.
De esta manera, el subdirector explicó que dicha iniciativa se trata de un órgano colegiado que permitirá el asesoramiento en el ámbito de la Conselleria, el Servicio Gallego de Salud y sus entes instrumentales, con el fin de diseñar la propuesta de políticas y coordinación entre los distintos agentes que componen el sistema.
Entre tanto, en esta primera edición de Muy IA Trends, los expertos han coincidido en que la IA representa una revolución en el cuidado de la salud. Principalmente, destacan su capacidad para personalizar tratamientos, predecir epidemias y liberar a los profesionales sanitarios de tareas administrativas, mejorando así la calidad de vida tanto de pacientes como de proveedores.
Asimismo, aunque reconocen los desafíos en la adaptación del sistema actual a las necesidades de la IA, el acceso y volumen de datos necesarios, así como los límites éticos y de capacitación, subrayan la importancia creciente de la IA como herramienta de apoyo en todas las fases de la atención sanitaria, incluyendo la detección y diagnóstico temprano de enfermedades para lograr una mayor calidad de vida.
