La Cuenta de Alto Costo –CAC– publicó un nuevo informe de la situación de la Enfermedad Renal Crónica -ERC-, la Hipertensión Arterial y la Diabetes Mellitus en Colombia durante el 2020. El documento resalta que la hipertensión y la diabetes mantuvieron su tendencia al alta el año pasado las cuales fueron de 9.08 y 2.86 casos por cada 100 habitantes respectivamente. Pese a que la cifra de prevalencia de hipertensión arterial es alta no se compara con los datos de otros países como: Perú con 14.4 o Brasil con 52.2 casos por cada 100 habitantes.
Respecto a la Diabetes Mellitus la prevalencia en otros países fue de 3.5 en República Dominicana, 26.8 en Puerto Rico, 7.4 en Brasil y 12.7 casos en Argentina por cada 100 habitantes. Es necesario saber la tasa de prevalencia estandarizada en otros países para hacer una comparación directa con otras poblaciones. Cabe mencionar, que estos índices muestran variabilidad debido a las diferentes características socioeconómicas y ambientales de cada país, así como el abordaje, medición y diagnóstico de la enfermedad.
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En comparación con el año anterior la hipertensión arterial y la diabetes tuvieron una disminución en su índice de prevalencia del 16.10% y 9.54% con respecto al 2019. Adicionalmente, se evidencia que la frecuencia de reporte disminuyó el año pasado durante marzo y abril, periodo en el que se declaró la emergencia sanitaria en el país.
“El mismo comportamiento se presentó en la medición de paraclínicos de seguimiento de nefroprotección (HbA1c, LDL, creatinina y albuminuria). Aunque el periodo de estudio contempla los primeros cuatro meses de la pandemia, este comportamiento es consistente con otros reportes a nivel internacional. La Administración de Salud de los Veteranos de EE.UU. reportó una disminución del 30% de la atención de pacientes con enfermedades cardiovasculares tanto virtual como presencial, mientras que la atención primaria disminuyó en un 21% “, detalla el documento de la CAC.
Otros informes resaltan la caída en la toma de HbA1c y de LDL entre el 81 y el 90% en el contexto del cuidado primario a partir de marzo de 2020, sin embargo el monitoreo de los indicadores de gestión a nivel nacional como el adecuado control de la tensión arterial, las metas de HbA1c y la proporción de casos sin pérdida de la función renal muestran un adecuado cumplimiento. Pero existen oportunidades de mejora principalmente en la medición de albuminuria.
Enfermedad Renal Crónica en Colombia
La incidencia y prevalencia de la enfermedad renal crónica disminuyeron. La incidencia cayó en un 14.79 % con respecto al 2019, estos hallazgos sugieren un subregistro, lo que quiere decir que las cifras de incidencia y prevalencia deben ser más altos. Esta premisa también está basada en que las condiciones precursoras de la enfermedad renal crónica tienen tendencias de incidencia y prevalencia altas, lo que en consecuencia provocaría un aumento de la enfermedad renal crónica.
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“Por otro lado, aunque en algunos estudios se proyecta un aumento en la prevalencia en las próximas décadas, otros sugieren que esta tendencia se ha estabilizado, estimando prevalencias que se encuentran entre el 13,0 al 14,1% entre los años 2003 al 2018 en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de EE.UU, sin cambios significativos para la mayoría de estadios de la ERC” sentencia el informe.
Infortunadamente, se observa un aumento en los casos de hipertensión y diabetes que no se han estudiado para enfermedad renal crónica. Específicamente, durante el periodo de estudio se reportaron 1.861.416 personas, lo que corresponde a un aumento del 32,92% de casos no estudiados con respecto al 2019. Esta tendencia es especialmente notoria en los mayores de 80 años, mostrando un caso de su diagnóstico en el cual posiblemente haya menor acceso de terapias de reemplazo renal.
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“Las mismas tendencias de incidencia y prevalencia de este periodo se observaron para la enfermedad renal crónica estadio 5, la cual, al contrario de la ERC en general, presentaba una tendencia al aumento en años anteriores. La disminución de los casos nuevos para el periodo 2020 fue del 11,42%, siendo este inferior durante todos los meses de estudio a comparación con el año de reporte 2019. Aunque en la literatura se estima un aumento del 29% al 68% de los pacientes con ERT entre el 2015 y el 2030 (23), aún no es clara la influencia de la emergencia sanitaria nivel mundial en la detección y diagnóstico de la enfermedad renal crónica estadio 5” concluye el informe.
