Este 17 de junio de 2025 marcó un hito en el debate laboral del país. La plenaria del Senado aprobó la esperada reforma laboral impulsada por el Gobierno del presidente Gustavo Petro. La sesión estuvo marcada por intensas discusiones, votaciones divididas y decisiones polémicas, reflejando la complejidad del articulado y la falta de consensos entre las distintas bancadas. Aunque el texto aprobado pasa ahora a conciliación con la Cámara de Representantes, los retos técnicos, políticos y económicos que representa esta reforma aún están por resolverse.
Durante la jornada, se discutieron artículos fundamentales, entre ellos el trabajo diurno y nocturno, la remuneración en días de descanso, la vinculación de las madres comunitarias y sustitutas, y la política pública para promover la formalización y los derechos laborales para transportadores de carga y pasajeros. Sin embargo, la falta de acuerdos en algunos puntos sigue poniendo en riesgo la aprobación de la reforma en su totalidad. Estos fueron los puntos tratados durante la jornada:
El artículo 9 y las tensiones dentro del Senado
Uno de los artículos más polémicos fue el artículo 9, relacionado con la estabilidad laboral reforzada, que fue finalmente eliminado tras una propuesta del Pacto Histórico. Con 45 votos, se eliminó este artículo, una decisión respaldada por varios partidos políticos. La eliminación de este artículo refleja la falta de consenso dentro del Senado y la división en torno a la interpretación de la reforma y sus posibles implicaciones para los trabajadores.
Por otro lado, la senadora María José Pizarro, del Pacto Histórico, expresó su descontento por la filtración de información relacionada con posibles acuerdos entre las bancadas. La filtración de estos acuerdos no solo aumentó la tensión en el Senado, sino que también generó acusaciones entre las distintas fuerzas políticas.
El Gobierno y las bancadas, sin acuerdos definitivos
El ministro del Trabajo, Antonio Sanguino, salió al paso de los rumores sobre acuerdos entre el Gobierno y las bancadas del Senado, aclarando que “no es cierto” que se haya alcanzado un acuerdo final sobre los puntos clave de la reforma. Según el ministro, aún no se ha llegado a un acuerdo definitivo sobre las cuestiones que afectan la esencia de la reforma laboral.
Estas declaraciones no solo generaron controversia, sino que también agudizaron el clima de desconfianza dentro del Senado, con varios congresistas pidiendo respeto y claridad en las negociaciones. La falta de un consenso claro sobre los aspectos fundamentales de la reforma sigue siendo un obstáculo importante para avanzar en su aprobación.
El artículo 23: un avance para los estudiantes del SENA
Uno de los avances más significativos fue la aprobación del artículo 23, que busca reformar el contrato de aprendizaje para los estudiantes del SENA. Con esta modificación, los aprendices del SENA recibirán el 100 % del salario mínimo, además de todas las prestaciones laborales, incluyendo prima, vacaciones, cesantías, auxilio de transporte e intereses de cesantías. Esta reforma ha sido celebrada por el Gobierno, destacando que es una “noticia histórica”, pues se trata de una medida que beneficia a miles de jóvenes colombianos.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, celebró la decisión y afirmó que esta reforma representa un cumplimiento con las y los jóvenes de Colombia, a quienes se les había negado este derecho desde 2003. Este avance ha sido visto como un paso positivo en el fortalecimiento de los derechos laborales de los jóvenes aprendices en Colombia.
Avances y eliminaciones clave en la reforma laboral
A lo largo de las sesiones del Senado, la reforma fue avanzando. No obstante, la eliminación de los artículos 37 y 38 marcó un giro importante en el proceso legislativo. Con 51 votos a favor y 45 en contra, los senadores decidieron retirar estos dos artículos cruciales del articulado.
El artículo 37 hacía referencia a los “trabajadores de tiempo parcial”, una figura que, según algunos sectores, podría haber permitido una mayor flexibilidad laboral pero que, a su vez, generaba riesgos en cuanto a los derechos salariales y las prestaciones sociales. Por su parte, el artículo 38 trataba sobre la “unidad de trabajo especial”, un concepto que también fue cuestionado por su posible impacto en la regulación del empleo y las condiciones laborales en Colombia.
Esta decisión fue tomada luego de intensas discusiones en la plenaria, donde las bancadas no lograron llegar a un consenso sobre los beneficios y riesgos de estas propuestas. La eliminación de estos artículos fue vista por algunos como un avance para proteger los derechos de los trabajadores, aunque otros advirtieron que podría frenar algunos de los objetivos de flexibilidad laboral propuestos por la reforma.
Otro de los puntos calientes del debate fue el artículo 37, relacionado con el trabajo por horas, que generó gran controversia en el Senado. Aunque no se llegó a un acuerdo definitivo sobre este tema, la discusión dejó claro que el trabajo por horas sigue siendo un tema sensible en el país. Muchos senadores expresaron su preocupación por los efectos que tendría la implementación de este modelo en los trabajadores más vulnerables, ya que podría resultar en salarios por debajo del mínimo establecido y una precarización del empleo.
La intervención del presidente Gustavo Petro a través de su redes sociales fue clara: solicitó que se eliminara todo artículo que promoviera el trabajo por horas o el alargamiento de la jornada laboral, una postura que fue bien recibida por algunos sectores sindicales y trabajadores, quienes temen que esto implique mayores riesgos de explotación laboral.
Hay que eliminar todo literal de artículo de la reforma laboral, que lleve al trabajo por horas o alargamiento de la jornada laboral, solicito volver al artículo de las trabajadoras menstruantes y su derecho si padecen dolor, para ir a una atención médica.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) June 17, 2025
El empresariado en…
Reforma de la jornada nocturna
Uno de los artículos más debatidos fue el relacionado con la jornada nocturna. En la Cámara de Representantes, se aprobó que la jornada nocturna empezara a las 6:00 p.m., pero en el Senado, y después de largas negociaciones, se acordó que comenzaría a las 7:00 p.m. hasta las 6:00 a.m., un punto medio entre las propuestas del Gobierno y los sectores opositores.
El rechazo a excluir a las microempresas de este ajuste fue un tema controversial, aunque el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, señaló que la Corte Constitucional ya se había pronunciado sobre este tema, considerándolo regresivo. Sin embargo, el Gobierno presentó un proyecto de ley para aliviar a las pequeñas unidades productivas mediante políticas diferenciadas que estarán listas para el 20 de julio de 2025.
Aprobación de recargos y jornada máxima
Otro avance significativo fue la aprobación del artículo 15, con 69 votos a favor y 23 en contra, que regula el recargo en días de descanso. Los trabajadores que laboren los domingos o festivos recibirán un recargo del 100% sobre su salario ordinario. Esta medida ha generado debate debido al número elevado de días festivos en Colombia, pero finalmente se aprobó la gradualidad en su implementación: el recargo aumentará del 80% en julio de 2025 al 100% en 2027.
Por otro lado, el artículo 12, aprobado con 59 votos a favor y 33 en contra, regula la jornada máxima legal, estableciendo que la jornada ordinaria será de 8 horas diarias y 42 horas semanales. El artículo introduce flexibilidad, permitiendo jornadas diarias variables siempre que el promedio semanal no exceda las 42 horas. Esta medida también considera excepciones para menores de edad y trabajos insalubres o peligrosos.
Eliminación de artículos y conciliaciones
Una de las decisiones más controvertidas fue la eliminación del artículo 76, que trataba sobre la política pública de formalización de los transportadores de carga y pasajeros. Aunque la medida había sido acordada en el marco de un paro de transportadores en 2024, el Senado consideró que la ponencia contenía un error y decidió eliminarla por vicios en el procedimiento. Este tema será conciliado para su aprobación en los términos que fueron acordados en la Cámara de Representantes.
Obstáculos pendientes, conciliación y falta de acuerdos definitivos
El camino de la reforma no está libre de tropiezos. Aún deben conciliarse puntos clave con la Cámara, incluyendo la política pública de formalización de transportadores (artículo 76), eliminado por vicios de procedimiento, y temas sensibles como la extensión de garantías laborales a microempresas y la regulación de condiciones especiales para trabajadores en régimen diferencial.