El Gobierno argentino, liderado por el presidente Javier Milei, implementó un cambio significativo en la comercialización de medicamentos de venta libre. Con la publicación del Decreto 1024/2024 en el Boletín Oficial, los medicamentos de este tipo ahora podrán ser exhibidos directamente en góndolas dentro de las farmacias, facilitando su adquisición sin la necesidad de solicitar asistencia al farmacéutico.
La normativa, que también cuenta con la firma del ministro de Salud, Mario Lugones, establece que los medicamentos deberán conservar sus propiedades fisicoquímicas y exhibirse en espacios señalizados dentro de los locales. Este avance es parte de una política de desregulación que busca proteger al consumidor y garantizar un acceso más simple y transparente.
Cómo funcionará la nueva disposición
La medida permite que los compradores accedan directamente a las góndolas de medicamentos de venta libre en farmacias, donde encontrarán información detallada sobre los productos, laboratorios y precios. En la caja, se pedirá el documento de identidad para verificar que el comprador sea mayor de 18 años.
Los medicamentos estarán debidamente señalizados y en cajas cerradas con sus prospectos correspondientes. Por su parte, las farmacias deberán garantizar que las condiciones de almacenamiento conserven la calidad de los productos.
En locales no habilitados como farmacias, la venta de medicamentos de venta libre estará limitada a analgésicos y antiácidos, aunque la autoridad de aplicación podría ampliar la lista en el futuro.
Controversia en el sector farmacéutico
La medida ha generado opiniones divididas. Desde el Gobierno se afirma que busca proteger al consumidor al establecer condiciones de expendio claras, garantizar la libertad de elección y mantener el derecho a la salud.
Sin embargo, entidades farmacéuticas han expresado su preocupación. “Ningún medicamento es completamente inocuo”, advirtieron en un comunicado. “Incluso los denominados de ‘venta libre’ pueden tener consecuencias graves si no se usan adecuadamente. Exponerlos en góndolas sin orientación profesional incrementa el riesgo de automedicación incorrecta”.
Los expertos también alertan sobre la falta de información que podría derivar en interacciones peligrosas con otros fármacos o el uso indebido de medicamentos recategorizados.
Recategorización de medicamentos: un antecedente clave
En septiembre de 2024, el Gobierno amplió la lista de medicamentos de venta libre a través de la Disposición 8227/2024. Entre los fármacos recategorizados se incluyeron protectores gástricos como Omeprazol, Esomeprazol, Pantoprazol y Lansoprazol, siempre que no superen las concentraciones de 40 mg (30 mg para Lansoprazol) y que el empaque contenga un máximo de 30 comprimidos.
Estos medicamentos, que antes requerían receta, ahora pueden adquirirse sin restricciones, excepto en casos pediátricos. Esta recategorización también implicó la eliminación de descuentos aplicados por obras sociales y prepagas, lo que generó críticas desde sectores de la salud.
Un cambio que redefine el acceso a la salud
El Decreto 1024/2024 marca un hito en la política de acceso a medicamentos en Argentina. Al permitir que los medicamentos de venta libre estén al alcance del público sin intermediarios, la normativa busca empoderar al consumidor y modernizar los modelos de atención en farmacias.
A medida que esta política se implemente, será clave evaluar su impacto en la salud pública y su capacidad para equilibrar el acceso simplificado con el uso responsable de los medicamentos. El debate entre los beneficios del libre acceso y los riesgos asociados a la automedicación seguramente continuará en los próximos meses.
En última instancia, esta medida representa un cambio en el paradigma de atención farmacéutica, donde el reto será garantizar que los beneficios no vengan acompañados de riesgos innecesarios para los pacientes.
Consulte el decreto aquí