En el marco del día mundial contra la hepatitis que se conmemora el próximo 28 de julio, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) hizo un llamado urgente para expandir el acceso a las pruebas y tratamientos para todas las hepatitis virales. Estas enfermedades afectan a más de diez millones de personas en las Américas, de las cuales solo el 23% está al tanto de su infección.
Entre los cinco tipos de hepatitis existentes, las variantes B y C son las responsables de la mayoría de las enfermedades y defunciones. En la región de las Américas, se estima que entre 60.000 y 100.000 personas fallecen anualmente debido a estas. Los síntomas suelen manifestarse en etapas avanzadas de la enfermedad, llevando a diagnósticos tardíos cuando ya se ha desarrollado una enfermedad hepática grave o cáncer.
La hepatitis es una amenaza silenciosa
El doctor Jarbas Barbosa, director de la OPS afirmó que, “Las hepatitis B y C son infecciones crónicas silenciosas que pueden progresar a cirrosis hepática o cáncer de hígado. La buena noticia es que existen medicamentos que pueden curar la hepatitis C, así como tratamientos eficaces para controlar la hepatitis B (…) Es crucial fortalecer los esfuerzos y la inversión para poner fin a este problema de salud pública“.
De acuerdo con el Informe Mundial sobre las Hepatitis 2024 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), solo el 36% de las personas infectadas con hepatitis C globalmente están diagnosticadas y apenas el 20% ha recibido tratamiento curativo. En cuanto a la hepatitis B crónica, solo el 13% de los infectados están diagnosticados y el 2,6% recibe medicación que salva vidas.
La importancia de la vacunación
La vacunación contra la hepatitis B, incluida en los calendarios de inmunización de todos los países y territorios de la región, está ayudando a eliminar su transmisión de madre a hijo durante el parto como problema de salud pública. Esto subraya la importancia de continuar con la vacunación para prevenir la infección en las nuevas generaciones.
El lema del 2024, “Es tiempo de actuar”, destaca la urgencia de acelerar las medidas para mejorar la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de la enfermedad en este día mundial. La OPS colabora con los países de la región en el diseño e implementación de políticas nacionales para la eliminación de las hepatitis, enfocándose en estrategias centradas en la atención primaria. Además, facilita el acceso a pruebas diagnósticas, tratamientos y vacunas a precios más accesibles mediante sus Fondos Rotatorios Regionales.
El precio de referencia mundial para el tratamiento curativo de la hepatitis C es de 60 dólares por un ciclo de 12 semanas, mientras que para la hepatitis B es de 2,4 dólares al mes. El día mundial contra la hepatitis, es una oportunidad para intensificar la lucha global contra estas enfermedades, promover la acción y la participación de individuos, socios y el público, y subrayar la necesidad de una respuesta mundial más fuerte.
Iniciativa de eliminación de la OPS
Los tipos B y C, así como la transmisión de la hepatitis B de madre a hijo, están incluidas en la Iniciativa de Eliminación de la OPS, cuyo objetivo es eliminar más de 30 enfermedades transmisibles y condiciones relacionadas en las Américas para 2030. Este llamado a la acción resalta la necesidad de fortalecer los sistemas de salud y asegurar que todas las personas tengan acceso a los servicios necesarios para prevenir, diagnosticar y tratar las hepatitis virales. Con esfuerzos coordinados y una mayor inversión en salud pública, es posible avanzar hacia la eliminación de estas enfermedades silenciosas que afectan a millones de personas en nuestra región.
