La cadena de suministro de medicamentos en Colombia atraviesa uno de sus momentos más críticos. A las denuncias por desabastecimiento de medicamentos, demoras en la entrega de tratamientos esenciales y a las auditorías recientes de la Superintendencia Nacional de Salud, se suma ahora una alerta desde el gremio de los comerciantes: la Federación Nacional de Comerciantes (FENALCO) señala que el principal factor que afecta la entrega oportuna de medicamentos es una deuda acumulada que supera los 4 billones de pesos en el sistema de salud.
El pronunciamiento se da luego de declaraciones del presidente Gustavo Petro en la red social X, en las que acusó a los gestores farmacéuticos de “saboteo” a las políticas de salud pública. La respuesta de FENALCO, contundente y respaldada con cifras, busca esclarecer el rol de estos actores logísticos dentro del Sistema General de Seguridad Social en Salud (SGSSS) y evidenciar las presiones económicas que comprometen su operación.
Desabastecimiento de medicamentos: el rol de los gestores farmacéuticos y su impacto en el sistema
“Es importante aclararle a los colombianos y sobre todo a los pacientes, que los gestores farmacéuticos, son agentes que brindan servicios de logística, distribución y dispensación ambulatoria de medicamentos en establecimientos farmacéuticos a los afiliados del Sistema General de Seguridad Social en Salud por encargo contractual de las EPS, IPS y de otros actores del sistema. Sólo en 2024 dispensaron 227 millones de medicamentos, representados en 105 millones de fórmulas, a 36 millones de usuarios”, explicó Jaime Alberto Cabal, presidente de FENALCO.
Estas cifras dimensionan la magnitud de la operación que ejecutan los gestores farmacéuticos, quienes han sido responsables por años de garantizar la entrega directa de medicamentos en todo el territorio nacional. Según el gremio, han sido precisamente estos agentes quienes han mantenido la continuidad del servicio, incluso apalancando financieramente al sistema durante periodos de alta tensión.
Una deuda millonaria y una mora de más de 600 días
De acuerdo con FENALCO, el principal obstáculo actual en la cadena de abastecimiento es el rezago financiero del sistema: “La difícil situación actual sobre la falta de entrega obedece principalmente a la deuda acumulada del sistema, hoy cercana hoy a los 4 billones de pesos, con una mora que supera los 600 días, lo cual afecta el flujo de caja y los recursos disponibles para la compra de medicamentos”.
Este desbalance financiero tiene un efecto inmediato: limita la capacidad de compra de los gestores, quienes adquieren los medicamentos con capital de trabajo propio y los facturan al sistema una vez se entregan a los pacientes. La falta de pago oportuno frena el ciclo operativo y pone en riesgo la sostenibilidad del modelo.
Factores adicionales que agravan la crisis
A la deuda se suman otros elementos que dificultan el acceso a medicamentos:
- Demoras en los trámites regulatorios ante el INVIMA.
- Escasez global de materias primas farmacéuticas.
- Efectos logísticos derivados de paros, bloqueos y cierres viales.
- La regulación de precios por parte del Estado, que limita márgenes operativos.
Como consecuencia de este entorno, “en el mercado se han dejado de comercializar algunos medicamentos”, advirtió el gremio.
Regulación de precios y estructura operativa
Según FENALCO, en el canal institucional el 82% de los medicamentos están sometidos a control directo de precios por parte de la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos. Esto desvirtúa las acusaciones de especulación o incremento artificial de precios por parte de los gestores farmacéuticos (GF). Además, en muchos casos, el portafolio de medicamentos (vademécum) es definido por las EPS, lo que también condiciona la oferta disponible.
“Cabe destacar que el inventario de medicamentos es adquirido con capital de trabajo propio de cada uno de dichos Gestores”, recalca la Federación, subrayando que el modelo actual exige una fuerte capacidad financiera por parte de los operadores.
Pluralidad de actores y ausencia de monopolios
En su declaración, Cabal también se refirió a la estructura del sector para responder a cuestionamientos sobre concentración de mercado: “Destacamos también que, el sistema de salud cuenta con un número amplio de Gestores Farmacéuticos registrados ante la Superintendencia de Salud, siendo en la actualidad más de 100, lo que garantiza que no se configuren monopolios en la dispensación de medicamentos”, concluyó.
Este aspecto resulta clave en el debate actual, ya que la pluralidad de gestores podría constituir una fortaleza operativa para el sistema, siempre y cuando se mantengan condiciones financieras que aseguren su viabilidad.
Una crisis estructural que exige respuestas integrales
El llamado de FENALCO pone sobre la mesa la necesidad de una intervención estructural en el flujo financiero del sistema de salud. Sin soluciones concretas al problema de la deuda acumulada y sin ajustes regulatorios que favorezcan el equilibrio entre sostenibilidad y acceso, la cadena de suministro farmacéutica seguirá en riesgo.
Mientras tanto, los pacientes enfrentan demoras, escasez y barreras para acceder a tratamientos esenciales. Una problemática que no puede ser abordada desde el señalamiento, sino desde el diseño de soluciones conjuntas entre gobierno, EPS, gestores farmacéuticos y autoridades regulatorias.
