La Secretaría de Educación del Distrito emitió una alerta sobre el deterioro en el acceso a los servicios de salud por parte del magisterio en la capital, señalando que los docentes y sus familias han perdido el acceso a una red complementaria y especializada que ofrecía atención en salud mental y diagnósticos de alta complejidad.
El origen de esta situación radica en la finalización de varios contratos de prestación de servicios médicos el pasado 31 de julio de 2025, sin que exista garantía de renovación por parte del Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio (FOMAG). A ello se suman problemas de flujo de recursos, especialmente la intermitencia en los pagos a instituciones prestadoras, lo cual ha derivado en la suspensión de servicios.
La Secretaría señaló particularmente la falta de pago a centros de alto nivel como la Clínica Monserrat, así como la terminación de contratos con entidades de referencia como la Fundación Santa Fe de Bogotá y la Clínica de Occidente, lo que, según el pronunciamiento oficial, “demuestra la falta de compromiso del FOMAG con la salud de los educadores”.
FOMAG: Riesgo en la continuidad de valoraciones médico-laborales
Además, el panorama se agrava por la incertidumbre que rodea la continuidad del contrato con la Fundación Proservanda, organización que presta servicios de salud y seguridad en el trabajo, en especial en procesos relacionados con valoraciones médico-laborales y la calificación de pérdida de capacidad laboral.
Frente a esta crisis, la Secretaría de Educación hizo un llamado urgente al FOMAG “para que asegure la atención oportuna y constante de los docentes y sus beneficiarios”. Asimismo, exigió al Gobierno Nacional “responder de manera inmediata ante la crisis en el sistema de salud de los maestros y garantizar el cumplimiento efectivo de las promesas de mejoramiento que hasta ahora no se han materializado”.