El 2 de julio de 2025, el Ministerio de Salud de Argentina publicó la Resolución 2109/2025, a través de la cual actualiza el reglamento del Sistema Nacional de Residencias Médicas, con el objetivo de jerarquizar el carácter formativo de esta etapa, restablecer la noción de beca educativa y corregir lo que la cartera sanitaria califica como “distorsiones y parches acumulados durante más de una década”.
El texto normativo introduce cambios profundos en la relación entre el Estado, las instituciones formadoras y los médicos residentes, con énfasis en la libertad de elección, la eficiencia en el uso de recursos y la recuperación del sentido pedagógico de la residencia como práctica supervisada.
Dos modalidades de beca residencias médicas: Ministerio o Institución
Uno de los puntos clave de la reforma es la implementación de un sistema optativo para los residentes, quienes podrán elegir entre dos modalidades de beca: Beca Ministerio o Beca Institución. En la Beca Ministerio, el Ministerio de Salud continúa siendo el otorgante directo de los fondos. Bajo esta modalidad:
- El monto de la beca se percibe con descuento por aportes previsionales.
- Los residentes son incorporados a la Obra Social de los Trabajadores del Estado Nacional.
- No pueden acceder a bonificaciones adicionales por parte de la institución.
- La institución formadora mantiene la responsabilidad de cubrir la ART y el seguro de mala praxis.
Por otro lado, en la Beca Institución, la beca es entregada directamente por el establecimiento formador, y presenta las siguientes características:
- El monto se otorga sin descuentos previsionales.
- Es posible sumar aportes o bonificaciones a criterio de la institución.
- La ART, el seguro de mala praxis y el seguro de salud son cubiertos por la institución, sin afectar el monto de la beca.
- Las instituciones deberán rendir cuentas del uso de los fondos asignados por el Estado nacional.
Ambas modalidades conservan el respaldo financiero del Ministerio de Salud de la Nación, que garantiza la continuidad del programa independientemente de la elección realizada por el residente.
Fin del enfoque laboral y recuperación del carácter educativo
Una modificación sustancial del reglamento es el retorno al concepto de beca formativa, excluyendo explícitamente su equiparación con un contrato laboral. “No es empleo público, no es una relación laboral. Es una etapa formativa con financiamiento estatal y cada profesional tiene derecho a elegir, con libertad, cómo transitarla”, enfatiza el texto de la resolución.
Con este cambio, el Estado nacional recupera su función de regulador pedagógico, mientras que las instituciones de salud retoman la autonomía organizativa en la administración de becas y supervisión del proceso de formación. Esta redistribución de responsabilidades apunta a ordenar el sistema, reducir burocracias y mejorar la supervisión académica y clínica del residente.
Nuevas responsabilidades para las instituciones formadoras
El nuevo marco legal exige que las instituciones formadoras, tanto públicas como privadas, asuman un rol más activo y autónomo en el acompañamiento del residente. Bajo este modelo:
- Las instituciones pueden adaptar las becas a sus necesidades operativas y formativas.
- Se establece un vínculo directo entre el residente y la institución.
- Deben rendir cuentas del uso de los recursos ante el Ministerio en el caso de administrar las becas.
Este enfoque busca fortalecer la relación entre el médico en formación y su entorno profesional, garantizando mayor coherencia entre el contenido educativo, la supervisión clínica y los recursos ofrecidos por el establecimiento.
Aplicación inmediata y condiciones de transición
La Resolución 2109/2025 entró en vigencia a partir de su publicación en el Boletín Oficial, por lo cual los residentes ingresantes en 2025 ya pueden elegir la modalidad de beca. Además, los profesionales que actualmente cursan una residencia también pueden optar por cambiar de modalidad, o mantenerse en la que tenían sin que ello afecte sus condiciones previas. El reglamento aclara que quienes decidan no cambiar, conservarán todos los beneficios ya otorgados.
Este proceso de aplicación inmediata está diseñado para ser gradual y no disruptivo, permitiendo una transición ordenada hacia el nuevo modelo, con acompañamiento de las instituciones y seguimiento por parte del Ministerio de Salud.
Según voceros del Ministerio, la reforma busca dejar atrás un periodo de más de diez años en el que se implementaron “parches” regulatorios, bajo los gobiernos kirchneristas, para disimular deficiencias estructurales en el sistema.
Durante este tiempo, el Estado nacional asumió roles operativos que no le correspondían, lo que diluyó la autonomía institucional y generó conflictos legales y presupuestales sobre la naturaleza jurídica del residente. “La situación debe sincerarse para continuar con un proceso de mejora real y sostenible que le devuelva a las residencias su condición de práctica profesional supervisada por una institución”, señala el documento oficial.
Perspectivas y desafíos: hacia un sistema más transparente y formativo
La reforma del reglamento del Sistema Nacional de Residencias Médicas marca un cambio de paradigma en la política de formación en salud en Argentina. Al centrar la atención en la formación como eje y al ofrecer opciones claras para la administración de recursos, el nuevo modelo busca restaurar la esencia académica de la residencia, fortalecer la autonomía institucional y garantizar un mejor uso de los fondos públicos.
Sin embargo, la implementación de este esquema demandará ajustes operativos, coordinación interjurisdiccional y un fuerte compromiso por parte de las instituciones formadoras para responder adecuadamente al nuevo marco.
Con la Resolución 2109/2025, el país da un paso importante hacia la consolidación de un sistema de residencias más claro, transparente y alineado con estándares internacionales, donde el residente es protagonista de su formación y donde el Estado actúa como garante y no como empleador.
Descargue aquí la resolución completa:
