La Organización Panamericana de la Salud (OPS) destacó la necesidad urgente de abordar las inequidades en el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva en la región de las Américas. En el marco del Día de Acción por la Salud de las Mujeres el pasado 28 de mayo, el Director de la OPS, doctor Jarbas Barbosa, subrayó que aunque la cobertura de servicios de salud reproductiva ha mejorado, alcanzando poco más del 81%, persisten desigualdades significativas tanto entre países como dentro de ellos.
Desigualdades y barreras de acceso
El doctor Barbosa enfatizó que las barreras de acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva son especialmente pronunciadas en poblaciones vulnerables, lo que resulta en peores resultados de salud para estos grupos. “Abordar estas inequidades es fundamental para lograr la salud universal, proteger los derechos humanos, promover la igualdad de género, luchar contra la discriminación y mejorar los determinantes sociales de la salud”, afirmó el Director de la OPS en un mensaje en video durante el encuentro regional.
Principales hallazgos del informe
La OPS presentó el documento “Estado del acceso a servicios de salud sexual y reproductiva”, que detalla la situación actual de la salud sexual y reproductiva en la región, las respuestas de políticas sanitarias y las barreras existentes. Entre los hallazgos clave, se destacan las disparidades en el acceso a métodos anticonceptivos de larga duración en América Latina y el Caribe, exacerbadas por la pandemia de COVID-19, que interrumpió la provisión pública y creó dificultades económicas para millones de mujeres.
La pandemia ha tenido un impacto significativo, forzando a muchas mujeres a interrumpir el uso de anticonceptivos debido a las disrupciones en los servicios de salud. La tasa de fecundidad en adolescentes ha disminuido ligeramente en la última década, pero aún se registran millones de embarazos no planificados cada año en esta franja de edad, lo que refleja una necesidad urgente de mejorar el acceso y la educación en salud reproductiva.
Mortalidad materna: un problema persistente
El doctor Barbosa también abordó el tema de la mortalidad materna, calificándola de “inaceptablemente alta” en las Américas. A pesar del nivel de desarrollo y los recursos invertidos, las inequidades en el acceso a una atención de calidad siguen siendo una de las principales dificultades. “Es fundamental contar con marcos normativos, políticas y regulaciones orientadas a la atención primaria de salud, con una visión integral de salud, sexualidad y reproducción”, agregó Barbosa.
La OPS destacó la importancia del trabajo intersectorial, involucrando no solo al sector salud, sino también a áreas como la educación y la protección social. El compromiso político y una financiación adecuada y sostenible son esenciales para implementar intervenciones costoefectivas dentro de los sistemas de salud.
Beneficios de la inversión en salud sexual y reproductiva
La doctora Suzanne Serruya, Directora del Centro Latinoamericano de Perinatología, Salud de la Mujer y Reproductiva (CLAP/SMR) de la OPS, destacó que la inversión en salud sexual y reproductiva tiene beneficios significativos para los Estados, las sociedades y las personas. “Garantizar el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva es una cuestión de derechos humanos y una estrategia para el desarrollo de los países”, afirmó Serruya.
El doctor James Fitzgerald, Director del Departamento de Sistemas y Servicios de Salud de la OPS, señaló que existen acuerdos y compromisos asumidos por la región que son ineludibles y requieren acción. “Es un tema de justicia social que tiene un enorme impacto en la vida de las personas, en particular de las mujeres, y es imperioso actuar en consecuencia”, indicó Fitzgerald. El documento presentado proporciona información basada en evidencia y sugiere pasos a seguir para avanzar hacia una sociedad más justa en términos de derechos sexuales y reproductivos.
El encuentro contó con la participación de autoridades de la OPS, representantes de la Organización de los Estados Americanos (OEA), ministerios de Salud de los Estados Miembro de la OPS y organizaciones de la sociedad civil. Esta acción fue apoyada por Asuntos Globales Canadá, a través del proyecto “Mejorando la salud de las mujeres y las adolescentes en situaciones de vulnerabilidad”.
