Este domingo el ministro de sanidad de la República Democrática del Congo, Eteni Longondo, notificó la existencia de un caso positivo del ébola en el área de Butembo, provincia de Kivu del Norte, en el noreste del país. Según las declaraciones, al parecer se trata de una agricultora, esposa de un superviviente de la epidemia que afectó a esta misma zona entre agosto de 2018 y junio de 2020 provocando 3.481 contagios y 2.299 muertos.
También puede leer: estos son los avances de la vacuna covid-19 en América Latina
“La mujer acudió el 1 de febrero a un puesto de salud con síntomas de esta enfermedad y murió al tercer día, pero los resultados de sus pruebas no se conocieron hasta este fin de semana, siendo positiva para ébola”. Declaró el ministro.
Ante este hecho, la Organización Mundial de la Salud -OMS- envió un equipo de epidemiólogos a esta zona para verificar que existiera un “rebrote” del virus. De acuerdo con los hallazgos, a la fecha los investigadores de la OMS ya han identificado a 70 contactos a los cuales se le está haciendo seguimiento, mientras se desinfectan los lugares donde estuvo la persona fallecida por ébola.
Por su parte, Longondo, calificó el contagio como un alto riegos de “resurgimiento” del ébola en esta zona, sin embargo, la OMS afirmó que es usual que se produzcan “casos fortuitos” tras una epidemia como la que surgió en las regiones de Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri entre 2018 y 2020. Aunque no se han facilitado datos concretos sobre este caso, el virus del ébola se puede mantener activo en el semen de los supervivientes hasta dos años después de la infección del paciente, según demostraron en 2017 científicos de la Universidad de Carolina del Norte y el hospital Elwa de Liberia.
En esta línea, la doctora Matshidiso Moeti, directora regional de la OMS, afirmó en un comunicado oficial que esperan cortar la cadena de contagios en la zona. “La experiencia y capacidad de los equipos locales de salud han sido decisivas en la detección de este nuevo caso de ébola, lo que allana el camino para dar una respuesta a tiempo. La OMS está dando apoyo a las autoridades locales y nacionales para el seguimiento, identificación y tratamiento de los contactos para cortar la transmisión del virus”, reveló.
Las muestras de la mujer fallecida, que fueron analizadas por técnicos del Instituto Nacional de Investigación Médica en la propia Butembo, han sido enviadas al laboratorio de este organismo en la capital, Kinshasa, para secuenciar el genoma del virus e identificar su cepa, lo que permitirá determinar sin lugar a ninguna duda si está vinculado a la epidemia de 2018-2020, la segunda más letal de la historia tras la que afectó a África occidental entre 2014 y 2016 y la peor que ha sufrido la República Democrática de Congo.
