El Fondo de Gastos Catastróficos, era un fondo que se encargaba de solventar los gastos de pacientes que sufrieran alguna de las 66 enfermedades catalogadas como catastróficas en México, incluyendo todos los tipos de cáncer en adultos y 22 patologías oncológicas infantiles. Posteriormente, este fondo se transformó en el Fondo de Salud para el Bienestar (Fonsabi).
Ahora bien, los recursos del Fonsabi se redujeron sustancialmente en un 44% pasando de $113.000 millones de pesos mexicanos en el 2019 a 64.000 millones de pesos mexicanos en el segundo trimestre del 2021. Al respecto organizaciones de la sociedad civil aseguran que dentro de este lapso de tiempo de solo dos años se han retirado $73.000 millones que financiaban el Instituto de Salud para el Bienestar –Insabi, la pandemia y otras acciones de salud.
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A pesar de la evidente falta de recursos para atender enfermedades de alto costo la Ley de Ingresos de la Federación plantea quitar el remanente generado por los $64.000 millones de pesos que quedan para destinarlo a la adquisición de vacunas y combate a la epidemia de Covid-19.
Al respecto, Andrés Castañeda, coordinador de la Causa Salud y Bienestar de Nosotrxs, una de las organizaciones del colectivo Cero Desabasto aseguró que “estar mermando este fondo, claramente está comprometiendo esta seguridad o garantía que ya se tenía y dependerá nuevamente de la aprobación de un presupuesto anual, que cada vez tendría que ser mayor, para poder garantizar los crecientes gastos que tendrá el sistema de salud, en concreto de estas 66 enfermedades que generan un gasto patológico”.
¿Qué está pasando con los recursos del fonsabi?
Es preciso decir, que el recorte en los recursos del Fonsabi se debe a tres reformas que se aprobaron en los últimos dos años, las cuales coparon el monto que el fondo puede acumular estableciéndose en 32.000 millones de pesos.
Esto quiere decir que el Gobierno puede decidir que hacer con los recursos excedentes del monto tope establecido. De 2019 a 2021 se ha gastado gran parte de los recursos etiquetándolos como compras de vacuna Covid o gasto del Insabi, pero a la fecha no es posible saber cuánto de ese monto ya se ha erogado.
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Recordemos que desde que el Insabi amplió la cobertura de salud y cobijó a 68 millones de ciudadanos, 16 millones más que el anterior seguro popular, dicho incremento ocasionó que se los gastos del Fonsabi crecieran notablemente. De acuerdo con el colectivo, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria ha calculado que el presupuesto actual de este fondo puede ser insuficiente para financiar las 66 intervenciones con la nueva población objetivo.
“Lo que hacía el Fondo de Gastos Catastróficos, ahora Fonsabi, que lo tenemos en los niveles de 2016, pero ahora con mucho mayor población a la que se le da cobertura, era garantizar que de esas 66 enfermedades incluyendo cáncer de adultos o 22 enfermedades oncológicas infantiles se tendría los recursos para poder solventar los gastos de quienes sufrieran estas patologías”, indicó Andrés Castañeda.
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Finalmente, el colectivo reiteró que las las instituciones de salud incluido el Insabi, siguen enfrentando un fuerte desabasto de medicamentos y al menos la mitad de las intervenciones que son “cubiertas” por el Fonsabi son tipos de cáncer en niños, niñas y personas adultas, que no están recibiendo sus tratamientos de forma oportuna y segura.
