La Organización Panamerica de la Salud (OPS) advirtió a los especialistas y sistemas de salud de América Latina sobre el incremento en las infecciones resistentes a los antibióticos, fenómeno atribuido a la mala utilización de estos fármacos durante la pandemia.
Según análisis de la organización, más de 90% de los pacientes que fueron hospitalizados por covid-19 recibieron tratamiento con al menos un agente antimicrobiano, a pesar de que solo un 7% desarrolló infecciones secundarias que realmente necesitaran antibióticos para su tratamiento. “Los antimicrobianos son medicamentos cruciales para salvar vidas, pero deben usarse de manera responsable, ya que las bacterias pueden desarrollar resistencia y hacer que sean ineficaces con el tiempo”, expresó la Dra. Carissa F. Etienne.
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Aunque no se presentó un listado de los antibióticos que pudieron causar el incremento de infecciones resistentes, la ivermectina, la azitromicina y la cloroquina, pese a que, según la OPS, no exista sustento científico sobre sus beneficios en pacientes con covid-19. “Si bien pueden pasar meses o incluso años hasta que veamos todas las repercusiones de su uso indebido y excesivo, no podemos permitirnos el lujo de esperar para tomar medidas”, señaló la directora de la organización.
Argentina, Uruguay, Ecuador, Guatemala y Paraguay son varios de los países que han informado aumentos en las infecciones resistentes a los antibióticos. Esto coincide con la alerta epidemiológica emitida el 22 de octubre, en la que se alerta a los países sobre un aumento en la incidencia de resistencia a carbapenémicos, posiblemente derivado del uso de antibióticos de amplio espectro en individuos afectados con covid-19.
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Antibióticos también pierden efectividad en infecciones intrahospitalarias
Adicionalmente, la OPS también se refirió al aumento de infecciones intrahospitalarias, fenómeno percibido desde que comenzó la pandemia. Como factores relacionados, las autoridades sanitarias señalan el elevado número de procedimientos invasivos (intubaciones o uso de ventiladores mecánicos), hacinamiento y la falta de disponibilidad de equipos de protección personal (EPP). “Se ha observado un aumento en la tasa de infecciones asociadas a dispositivos en las unidades de cuidados intensivos, principalmente por catéter vascular central”, alerta la organización en el documento de mediados de octubre.
Para evitar la progresión de este problema de salud pública, la autoridad sanitaria regional instó a los países a aprovechar las redes de laboratorio que se crearon durante la pandemia, con el propósito de rastrear y vigilar la resistencia a los antibióticos. Asimismo, se deben promover pautas claras basadas en la evidencia y la inversión en agentes microbianos que sean novedosos y mejores a los que se utilizan hoy en día.
“Necesitamos que todos los países trabajen juntos ahora para controlar el aumento de la resistencia a los antimicrobianos. Solo así podremos seguir confiando en estos medicamentos para tratar enfermedades y prevenir una crisis sin precedentes”, enfatizó. La información sobre las infecciones resistentes en América Latina y el Caribe se presentó a pocos días de la Semana Mundial de Concientización sobre el Uso de los Antimicrobianos 2021.
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