Tras diversas discusiones y cerca de 118.063 profesionales sanitarios infectados de covid-19, España reconoció este martes que el virus debe ser categorizado como enfermedad profesional entre los agentes sanitarios y no solo como una “contingencia profesional derivada de un accidente de trabajo”.
El decreto que fue elaborado por la Secretaría de Estado de la Seguridad Social y fue sometido a consideración del Consejo de Ministros españoles con el fin de acabar con las disputadas de más de un año desde que inicio la emergencia sanitaria en ese país y velar por la seguridad del talento humano en salud.
“Hoy se ha dado el último paso al trabajo de meses del Consejo General de Colegios de Médicos, todos los sindicatos sanitarios, las sociedades científicas y diversas agrupaciones profesionales para declarar al covid-19 como una enfermedad profesional”. Indicó el Presidente del Sector de Sanidad del sindicato de funcionarios CSIF, Fernando Hontangas.
Asimismo, Hontangas reiteró que buscará “exigir expresamente a los ministerios de Inclusión y Sanidad que cataloguen de oficio como enfermedad profesional todos los casos de profesionales sanitarios que ahora mismo están computados como accidente laboral”.
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En esta línea, Según el gobierno español, la declaración de la COVID-19 como enfermedad profesional también deberá cobijar al amplio espectro del que se compone el personal sociosanitario. Es decir, a celadores y otros trabajadores que desempeñan su labor en estos establecimientos de sanidad.
“La medida, tendrá carácter retroactivo, es decir que esta condición será reconocida en aquellos que contrajeron el virus desde que la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó la alerta al nivel de pandemia y su vigencia durará hasta el fin de todas las medidas de prevención”.
Importancia de la categorización “enfermedad profesional” en el personal sanitario
Según comentan los expertos, la diferencia entre ser considerada enfermedad profesional al covid-19 o mera contingencia es fundamental, ya que la primera ofrece cobertura al trabajador durante toda la vida, de forma que está protegido de todas las enfermedades y contingencias derivadas de la infección hasta el momento de fallecer. En este sentido, la consideración de “contingencia profesional” derivada de accidente de trabajo sólo extiende esa protección al profesional durante los cinco años posteriores al contagio.
Ante este reconocimiento Gabriel Del Pozo, secretario general del sindicato CESM, indico. “Es inaudito que hayamos tenido que esperar todo este tiempo para que el Gobierno reconozca algo que cae por su propio peso. Si un profesional se pasa 12 ó 14 horas trabajando y en contacto directo con el virus, ¿dónde va a infectarse? ¿en un bar, en una discoteca? Máxime con todos los problemas de seguridad y falta de equipos de protección individual (EPI) que tuvimos durante la primera ola”.
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Por su parte, Vicente Matas, vocal nacional de Atención Primaria Urbana de la Organización Médica Colegial (OMC), sostuvo que este reconocimiento debe ir mucho más allá de la pandemia. “El siguiente y obligado paso es que la profesión sanitaria sea reconocida como una profesión de riesgo, independientemente del contexto actual de la covid-19”.
