Consumo de café no afecta al sistema circulatorio ni al corazón

Una investigación adelantada por el Instituto de Investigación William Harvey de Queen Mary en Londrés, presentado en la Conferencia de la Sociedad Cardiovascular Británica (BCS) en Manchester, reveló que el consumo de café, incluso hasta 25 tasas, no tiene afectaciones para el corazón ni el sistema circulatorio.
Consumo de café no afecta al sistema circulatorio ni al corazón
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Una investigación adelantada por el Instituto de Investigación William Harvey de Queen Mary en Londrés, el cual se presentó en la Conferencia de la Sociedad Cardiovascular Británica (BCS) en Manchester, reveló que el consumo de café, incluso hasta 25 tasas, no tiene afectaciones para el corazón ni el sistema circulatorio.

El estudio, que financió la Fundación Británica del Corazón (BHF), incluyó a más de 8mil personas en el Reino Unido.

Los resultados del nuevo estudio desacreditan los estudios anteriores que afirman que beber café aumenta la rigidez arterial. 

Las arterias transportan sangre que contiene oxígeno y nutrientes de su corazón al resto de su cuerpo. Si se vuelven rígidas, puede aumentar la carga de trabajo en el corazón y aumentar la probabilidad de que una persona sufra un ataque cardíaco o un derrame cerebral.

¿Cómo se realizó el estudio?

El profesor Steffen Petersen, quien presentó el estudio en BCS, explicó que el consumo de café se clasificó en tres grupos para el estudio:

Quienes beben menos de una taza al día, los que beben entre una y tres tazas al día y los que beben más de tres.

Aunque se excluyeron a las personas que consumían más de 25 tazas de café al día, no se asoció el aumento de la rigidez de las arterias con las personas que bebían hasta este límite alto en comparación con las que bebían menos de una taza al día. 

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Este análisis incluyó a 8.412 participantes en el UK Biobank Imaging Study que se sometieron a imágenes de resonancia magnética cardiovascular (RMC).

Asimismo fueron sometidos a mediciones de forma de onda de pulso a través de sondas de dedos.

Con esto se buscó evaluar la asociación del consumo de café con la rigidez arterial mediante dos formas de medidas de rigidez: 

Distensibilidad aórtica e Índice de rigidez arterial

Estas medidas son la distensibilidad aórtica (AoD) es una medida local de la rigidez arterial, mientras que el índice de rigidez arterial (ASI) es una medida de la reflexión de la onda. 

Ambas medidas han demostrado ser predictores de eventos cardiovasculares.

La AoD se derivó utilizando un método para obtener las áreas luminales máximas y mínimas en la aorta ascendente y descendente de las imágenes CMR. 

El ASI se calculó dividiendo la altura del participante por el intervalo de tiempo entre los picos de la forma de onda registrada. Se excluyeron los valores atípicos AoD y ASI.

Las asociaciones entre el consumo de café y las medidas de rigidez se evaluaron por separado utilizando modelos de regresión lineal univariantes que ajustan la edad, el sexo, el origen étnico, el consumo de tabaco actual, los niveles más altos de educación, la estatura, el peso, el consumo regular de alcohol, la ingesta de verduras, carne, agua y té.

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Los resultados y conclusión

Las características básicas de los 8,412 participantes incluidos en los análisis finales se resumen en que los bebedores de café moderados y pesados (más de tres tasas) ​​tenían más probabilidades de ser hombres, fumar y consumir alcohol regularmente. 

Sin embargo no observaron diferencias significativas en la presión arterial sistólica y la frecuencia cardíaca entre los grupos.

Asimismo, las distribuciones no ajustadas de AoD en la aorta ascendente y descendente fueron similares en los 3 grupos.

“Nuestros modelos de regresión no encontraron diferencias estadísticamente significativas en las tres medidas de rigidez arterial para los individuos que beben 1 a 3 tazas o menos de 3 tazas de café al día”, concluye el estudio.

En conclusión, en el grupo de estudio, que es de mediana edad sin enfermedades cardiovasculares, el consumo de café moderado a intenso (3 o más tazas al días) no se asoció con cambios significativos en la rigidez arterial medida por la AoD y la ASI en comparación con las personas que beben 1 taza de café, o menos, al día.

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