A inicios de esta semana, el presidente Andrés López Obrador (AMLO) anunció que el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) será reformado para optimizar la prestación de servicios de salud. En su declaración matutina, aseguró que el sistema de salud mexicano se posicionaría dentro de los mejores del mundo el próximo año.
En la actualidad, el ISSSTE atraviesa una crisis que ha desembocado en la falta de atención oportuna, la entrega de medicamentos y el seguimiento a los más de 10 millones de afiliados. En palabras de AMLO, la pésima gestión del instituto es resultado de su privatización que buscará ser revertida: “todos los servicios integrales de salud están subvencionados, subcontratados”, así como a la corrupción interna.
Aunque en la conferencia de prensa no se entregaron detalles, el presidente indicó que un equipo de trabajo está diseñando la reforma estructural que el ISSSTE necesita. Como parte del proceso, se han intervenido centros de salud, hospitales; se han implementado estrategias para reducir el déficit de médicos especialistas.
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Alcaldes establecieron mecanismos para pago de acreencias al ISSSTE
El mismo día, tras una reunión sostenida por los alcaldes de los cinco municipios de Baja California Sur, se reconoció públicamente la deuda existente con el ISSSTE y FOVISSSTE que asciende a 3 mil millones de pesos mexicanos. El acuerdo consiste en la realización de pagos mensuales durante los próximos 15 años, tiempo que variará en función de la deuda.
“Baja California Sur es uno de los primeros estados que tiene la voluntad política, aún con las dificultades que implica, de demostrar que es posible recuperar al ISSSTE, de abonar, de pagar compromisos históricos”, mencionó el gobernador Victor Castro Cosío. Según las autoridades, la medida facilitará la entrega e las obras de ampliación al hospital de La Paz, dar mayor atención a trabajadores de Los Cabos y fortalecer el acceso a todos los servicios de salud y sociales.
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